Hace unos meses te platicábamos de Carlos Santamaría, un niño de nueve años que acudía cotidianamente a tomar clases de un diplomado en Bioquímica y Biología Molecular a la Facultad de Química de la UNAM. Ahora, vuelve a ser noticia debido a que ha concluido satisfactoriamente dicho diplomado. Su coeficiente intelectual elevado y la interacción con sus compañeros del diplomado y maestros, no lo convierten en un "adulto pequeño", al contrario, Carlos sabe que es un niño y como tal se comporta.
Actualmente también cursa a la par el cuarto año de primaria en línea en un programa avalado por la Comunidad Económica Europea, del que tuvieron conocimiento durante el año que vivió en España con sus papás. Pero la química no lo es todo para Carlos, ya que ahora se plantea comenzar un curso de álgebra superior dictado por el departamento de Matemáticas de la misma Facultad de Química.
Sus papás lo han acompañado a cada una de sus clases en la UNAM para evaluar su manera de relacionarse con sus compañeros y maestros y darse cuenta de que puede adaptarse perfectamente a un grupo de estudiantes que le duplican la edad fácilmente. Una de las cosas que destacan sus padres es que lo ven feliz, completo, realizándose como niño y a la vez satisfaciendo sus ganas de aprender como grande.
Una gran felicitación a los padres de Carlos que le han permitido saciar su hambre y sed de conocimiento, también a la UNAM que le abrió sus puertas, y sobre todo a Carlos, por demostrarnos que es posible ser un genio de tan solo nueve años, sin dejar de ser un niño.
Imagen | UNAM
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