Soy un fan y usuario acérrimo de Google, es por eso que probar un dispositivo sin los servicios de la Gran G sonaba a un importante reto para mi. Es así que comencé a probar la nueva tablet "profesional" de Huawei un poco excéptico de lo que podría lograr, pero la realidad es que me sorprendió muy gratamente por sus capacidades.
Este es nuestro análisis de la Huawei MatePad Pro, escrito directamente en la tablet con ayuda de su funda-teclado.
Huawei MatePad Pro, análisis en video
Especificaciones técnicas
La MatePad Pro es la tablet flagship de Huawei, con la potencia vista en sus smartphones de gama premium, más otros agregados que la hacen una poderosa herramienta de trabajo. Su hoja técnica completa queda de la siguiente manera:
| Huawei MatePad Pro | |
|---|---|
| Dimensiones y peso | 246 x 159 x 7.2 milímetros, 460 gramos de peso |
| Pantalla | LCD de 10.8 pulgadas Resolución WQXGA, 2560 x 1600 pixeles) Agujero en pantalla, aspecto de imagen 16:10 |
| Chipset | Kirin 990 5G. Fabricación en 7 nm, ocho núcleos: 2x2.86 GHz Cortex-A76, 2x.09 GHz Cortex-A76, 4x1.86 GHz Cortex-A55 GPU Mali-G76 a 600 MHz |
| Memoria RAM y almacenamiento | 6 GB de RAM 128 GB de almacenamiento, expandible hasta 256 GB con nanoSD |
| Sistema Operativo | Android 10 AOSP (sin aplicaciones de Google) con capa EMUI 10 con Huawei Mobile Services |
| Cámaras | Principal: 13 megapixeles f/1.8 Frontal: 8 megapixeles f/2.0 |
| Batería | 7,250 mAh, con carga rápida de 40W por USB Type-C, cargados de 20W incluido Carga inalámbrica de 15W Carga inalámbrica inversa de 7.5W |
| Otros | Reconocimiento facial Wi-Fi 2.4 GHz y 5 GHz Bluetooth 5.1 con soporte LDAC Soporte para teclado y M-Pencil |
| Precio | 15,999 pesos, paquete de MatePad Pro + funda-teclado + M-Pencil 11,999 pesos, MatePad Pro 6/128 GB |
MatePad Pro como tablet: funcionamiento adecuado, sin sorpresas
La MatePad Pro es una tablet que no tiene sorpresas escondidas en cuanto a diseño y pantalla se refiere. Su cuerpo es de aluminio y con menos de medio kilogramo de peso, tiene un agarre cómodo y que en ningún momento se torna cansado en el día a día. Navegar en internet, lo que incluye redes sociales y demás contenido, con la tablet "alzada" es posible durante largos periodos de tiempo sin llegar a sentir pesadez ni cansancio.
Eso sí, es importante tener cuidado con cómo sujetamos la MatePad Pro, ya que debido a su tamaño y material, se puede tornar resbaladiza y escapar de nuestras manos.
En general, la interacción visual con la MatePad Pro es agradable, a pesar de que sufre los males conocidos de toda tablet con Android: las aplicaciones no están optimizadas para sacar total provecho de la mayor pantalla sino que la interfaz sencillamente se muestra más grande. No obstante, para actividades como leer, este aspecto sin lugar a dudas se aprovecha. Es cuestión de acostumbrarse.
En contraste, la interacción táctil con la pantalla quizás no sea la más cómoda. Los claros ejemplos son que escribir con el teclado en pantalla resulta un poco problemático, sobre todo para aquellos con manos pequeñas; misma situación que se presenta con actividades como jugar. Después de un poco de práctica, es posible escribir, jugar y realizar otras actividades en la mayor diagonal de la MatedPad Pro sin problemas. De nueva cuenta, es cuestión de acostumbrarse.
Para complementar este apartado, es importante hablar del consumo multimedia. Primero, la pantalla de la MatePad Pro tiene un gran aprovechamiento de frontal, reduciendo los marcos en gran medida -aunque aún son notables-, lo que incluso la hace más pequeña que un iPad de 7ma generación con menor diagonal (10.2 pulgadas).
Segundo, el panel es de excelente calidad, con representación de colores apenas saturados (algo que dependiendo de gustos puede ser bueno o malo), que en lo personal me gustaron mucho. Los niveles de brillo mínimo y máximo son muy acertados, permitiendo ver contenido en una habitación a oscuras sin lastimar la vista, así como disfrutar de la pantalla sin problemas aún con mucha luz -aunque es importante mencionar que nunca usé la tablet en exteriores.
Sin embargo, el aspecto que se lleva totalmente las palmas en el consumo multimedia es el sonido. La firma de Harman Kardon en los cuatro altavoces se nota y es casi increíble que un dispositivo tan pequeño como es la MatePad Pro pueda entregar sonido de tal potencia, sin dejar de lado la calidad, ya que como sabemos, un alto volumen no es sinónimo de mejor calidad.
MatePad Pro como "portátil": la sorpresa que podría convencer a algunos de abandonar el portátil
La Huawei MatePad Pro por si sola es una tablet que está bien, sin más. No obstante, con la adición de la funda-teclado, y en menor medida del M-Pencil, se convierte en una poderosa herramienta que podría ser suficiente para sustituir el portátil de algunos. O quizás no a este grado, pero definitivamente ofrece una nueva ventana de oportunidad.
La adición del teclado dota a la MatePad Pro de un funcionamiento muy similar al de una laptop, incluso respondiendo a combinaciones de teclas para una navegación más fluida, ALT + TAB para cambiar entre aplicaciones por ejemplo. Pero, el verdadero aprovechamiento de este aspecto está en el "Modo escritorio", que permite sacar mayor partido del tamaño de la pantalla con una multitarea al estilo de los portátiles.
Sí, la multitarea del MatePad Pro como tablet es buena, pero con el modo escritorio este aspecto se potencía para permitir un uso más versátil y dinámico, con ayuda también de los accesorios.
En este punto es importante mencionar que es posible usar el "Modo escritorio" del MatePad Pro con cualquier teclado Bluetooth, no necesariamente debe ser la funda-teclado oficial de Huawei. Sin embargo, este accesorio le da un toque especial, primero por estar hecho a la medida y porque demuestra un funcionamiento soberbio, pero principalmente porque también protege la MatePad Pro y le da un toque de elegancia que se aprecia.
Algunas de mis labores en Xataka México requieren de mi atención a la actualidad tecnológica, para lo cual me apoyo en una laptop y de un monitor externo. Esta configuración me ayuda a visualizar mucho contenido a la vez en aras de no pasar algo importante por alto. Estoy tan acostumbrado a esta manera de trabajo, que estoy seguro que el uso de dos pantallas hace más eficiente mi redacción de contenido de actualidad. Entonces si bien para estas actividades la pequeña pantalla -en comparación con mis dispositivos de trabajo cotidiano- de la MatePad Pro no es suficiente, para otras tareas que requieren menos multitasking, la tablet profesional de Huawei resultó ser sorprendemente efectiva, y también cómoda.
El ejemplo más claro que puedo mencionar es precisamente la redacción de este análisis, realizado enteramente desde la MatePad Pro colocada sobre mi regazo mientras estoy recostado en cama. Definitivamente la tablet de Huawei es más cómoda que tener mi laptop en la misma posición e igualmente efectiva, ya que mi únidad necesidad se centra en teclear, sin preocupaciones adicionales.
Es importante recalcar que esto no quiere decir que la MatePad Pro no sea útil en cuestiones de multitarea porque sí lo es. En otras de mis labores que no necesitan tanto dinamismo, la pantalla de 10.8 pulgadas resultó suficiente para revisar correos, estar al pendiente de la comunicación con mis compañeros, escuchar música y redactar. No está de más mencionar que todo esto sucede al mismo tiempo, y en ningún momento la MatePad Pro sufre. La potencia del Kirin 990 y los 6 GB de RAM, junto con la optimización de Android 10 queda patente.
Lo mismo sucede con la batería integrada, demostrando que la autonomía de la MatePado es realmente notable. Ningún día utilicé la tablet de Huawei como única herramienta de trabajo, pero con un uso de alrededor de 4 horas (entre trabajo y ocio), llegó a soportar 3 días de autonomía antes de necesitar una carga. Para llenar su batería con el cargador incluido de 20W se requieren cerca de tres horas.
Para finalizar la experiencia de uso de la MatePad Pro es importante hablar del elefante en la habitación, o más bien de la falta del elefante. La tablet profesional de Huawei no incluye los servicios de Google, y sorprendentemente me fue bien sin ellos. Es decir, siendo la MatePad Pro un dispositivo en el que me enfoqué 100% en su productividad, no me preocupé por instalar apps como por ejemplo Uber, plataformas de bancos o Paypal. Para eso tengo el móvil.
Entonces, para la instalación de aplicaciones hice uso de AppSeeker, la app de Huawei que ayuda a la búsqueda de APKs para su instalación en el dispositivo y fácilmente pude instalar todo lo necesario para mi productividad, y un poco más.
Por otro lado, para aquellos servicios a los que no pude acceder ni con APKs, como Gmail, usé la app propia de Huawei de Correo y su funcionamiento fue idóneo, y para YouTube accedí desde la versión web e inicicé sesión con mi cuenta y listo. No es lo ideal, pero de nuevamente, para salir del paso de una necesidad no primordial, funcionó bastante bien.
Finalmente, si bien es posible instalar Chrome, es imposible su sincronización debido a la inaccesibilidad de la tablet de Huawei a los servicios de Google. Afortunadamente también soy usuario de Edge, por lo cual tengo sincronizados ahí mis marcadores y demás información de utilidad de Chrome, por lo cual tras la instalación del navegador de Microsoft por medio de APK, fue fácil acceder a todos mis datos en la MatePad Pro.
A pesar de ser un usuario que confía plenamente en Google, no tuve problemas para ser productivo en la MatePad Pro, y sin necesidad de realizar procedimientos complejos para instalar nada,
MatePad Pro, una ventana de oportunidad
El veredicto es que para aquellas personas que no necesiten tanto dinamismo para sus actividades, la MatePad Pro y su funda-teclado son excelentes herramientas, por tres aspectos fundamentales: productivudad, potencia y autonomía, con el adicional de la portabilidad que solo un dispositivo de este tipo puede proveer.
En mi caso, la MatePad Pro no puede sustituir a mi portátil como herramienta principal de trabajo, pero sí ha abierto una ventana de oportunidad como complemento para mis actividades. Más allá de redactar desde cama, se me ocurren algunas situaciones en las que la MatePad Pro podría ser más efectiva que mi laptop, por ejemplo trabajar desde los diminutos asientos de un avión.
Eso sí, es importante tener en cuenta el factor precio. La cantidad a desembolsar por la MatePad Pro con funda-teclado es elevada y por el mismo costo se puede acceder a otras herramientas, desde otras opciones de tablet hasta incluso portátiles. Como siempre, es cuestión de necesidades y posibilidades.
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