Halo, no es solo el nombre de un videojuego popular, también es un fenómeno meteorológico que suele presentarse alrededor de los cuerpos celestes más brillantes en nuestro firmamento: el sol y la luna. El día de hoy en varios puntos del país se ha apreciado un halo alrededor del sol, tiene la forma de un arcoiris circular, pero ¿cómo se forma?
Resulta que, la luz del sol experimenta un fenómeno de refracción en cristales de hielo que se encuentran suspendidos en la tropósfera es decir entre 7 y 17km por encima de la superficie terrestre, dependiendo si te encuentras en cerca de los polos o del ecuador. Los halos suelen tener un radio de 22 grados, su borde interior es de tono rojizo, y suele degradarse hasta el azul o violeta en el exterior.
Aproximadamente a 10km de la tierra (la altura a la que suelen volar los jets) la temperatura ambiente es de -60ºC, lo cual no permite que existan partículas de agua en suspensión, sino solo partículas de hielo.
Un halo se forma por los reflejos de millones de cristales de hielo que tienen la orientación y angulación para dirigir la luz refractada hacia tus ojos. Un dato curioso: cada persona ve un halo diferente, ya que es necesario que los cristales estén más o menos perpendiculares a los rayos del sol, permitiéndole a la luz pasar a través de dos de sus facetas, esto se produce en cristales hexagonales.
Un halo existe solamente si hay algo que lo vea, ya que es el efecto de una colección de rayos luminosos que viajan en una dirección particular, y convergen en un lente receptor, sea un ojo, o una cámara. Así que deberías sentirte muy afortunado si puedes verlo, esos rayos están en convergencia solo para ti.
Para poder visualizar este fenómeno es necesario que no mires directamente al sol, pues podría dañar tu vista por la intensidad de la luz y los rayos ultravioleta, lo que te recomiendo es que utilices tu dedo pulgar para "tapar el sol con un dedo" y que puedas admirar ese fenómeno meteorológico.
Imagen | Melina Marisol
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