‘Captain Tsubasa: Rise of New Champions’ es el nuevo juego de la franquicia conocida en México como “Los Supercampeones” que busca ser un golpe a la nostalgia de muchos, pero aprovechando los gráficos de las consolas actuales.
El título ya se encuentra disponible para PS4, Nintendo Switch y PC. Lo hemos estado jugando y tenemos opiniones encontradas con un juego que no quiere competir contra FIFA ni contra PES, solo quiere ser un juego del anime de fútbol.
Iniciemos con dos factores importantes, todos los personajes que aparecen en el juego tendrán el nombre original de la serie en Japón, en ningún momento aparecerá “Oliver Atom”. Esto no es nada nuevo, recordemos que la última serie animada de ‘Captain Tsubasa’ decidió mantener ese nombre de manera internacional, para no generar confusiones con los personajes en diferentes regiones.
Lamentablemente no tenemos doblaje latino, podremos escuchar a los actores japoneses, pero todos los textos y los menús sí tienen traducción al español, en ese aspecto no nos debemos preocupar.
Luz y sombra
Debemos iniciar por la jugabilidad, ya que es el factor clave del juego. En apariencia se trata de un juego de fútbol con la configuración de botones clásica en este tipo de juegos, podremos pasar el balón raso, alto o un pase filtrado, como la posibilidad de disparar, correr y un botón exclusivo para esquivar rivales.
Para defender podemos correr, barrernos, hacer presión con el cuerpo o llamar a un segundo compañero. Les estamos contando los controles de siempre en ‘FIFA’ y ‘PES’. La pequeña diferencia, aquí no se pitan las faltas, así que es un juego 100% arcade, aunque sí tendremos fuera de lugar, saques de meta y de banda.
Cuando atacamos con el balón y tenemos cerca a un rival, podemos presionar un botón para esquivarlo, siempre y cuando el rival se encuentre en la distancia ideal y de preferencia haga algún intento por quitarnos el balón.
En el caso de lograr esquivarlo tendremos una animación del movimiento, ya sea cambiando la toma para mostrarlo de frente o con la cámara normal del estadio, pero haciendo una pequeña pausa para destacar el movimiento.
Para disparar tendremos una barra de potencia que va creciendo, cuando llegue al máximo, se activará un disparo especial, que solamente podrán activar algunos jugadores de cada equipo. Cuando cargamos el tiro, nuestro jugador baja su velocidad y es muy fácil que le quiten el balón, por lo que es necesario hacerlo en el espacio necesario.
Si logramos hacerlo correctamente, veremos una animación espectacular de disparo, mientras el portero intentará detener el balón, la animación dependerá del jugador. Este sin duda es el mejor momento del juego, es emocionante y muy nostálgico, para ver escenas así:
Los primeros tiros serán muy complicados que sean gol, ya que los porteros cuentan con una barra de resistencia que se va agotando con el paso de los disparos. Por ello, es importante atacar durante todo el partido.
Existirán defensas que cuentan con habilidades especiales donde se pueden lanzar para detener un disparo, además de ser muy fuertes para quitar el balón, en este aspecto el jugador nos da un aire a una clase defensiva en un juego de estrategia y nos agrada mucho esa idea, el problema es que no es aprovechada.
Cuando el balón se encuentre en el aire y dos jugadores quieran disputarlo, iniciará una especie de combate donde el personaje que presione más rápido un botón podrá ganar la posición. El equipo también tendrá una barra especial que se llenará después de hacer movimientos especiales y al activarla todos el equipo tendrán más energía por un tiempo limitado.
Lo malo del juego, es cuando no tenemos esas animaciones espectaculares. Los movimientos de los personajes son muy pobres, se siente como si se saltarán fragmentos de animaciones en algún movimiento, cuando corren los jugadores toman un impulso inicial y si tienen poca energía avanzan a la misma velocidad, se siente más como el “turbo” de un auto, que un jugador corriendo.
La física del balón es pésima, parece que nunca tiene aire y no rueda a un ritmo normal, además que los jugadores tienen pegado el balón como si fuera un imán, algo que pasaba un poco en los ‘PES’ de la generación del PS2.
El problema no es que lo comparemos con un “simulador” de fútbol, es que ni como juego arcade está bien realizado. Hasta ‘Super Mario Strikers’ de hace 15 años, tiene mejores físicas en el balón.
Cuando mezclas esas dos realidades, tienes un juego muy disparejo, ya que en realidad la clave es esquivar a los defensas en el momento correcto para hacer un espectacular disparo. Un detalle importante, a pesar de estos problemas, el juego es divertido en algunos momentos.
Cuando se juegue con amigos se puede pasar un rato agradable, jugándolo de manera casual. Nuestro problema es que, si hubieran decidido mejorar otros aspectos, estaríamos ante un juego muy atractivo.
Dos historias, un camino
Si queremos jugar un modo especial para un solo jugador, tendremos una historia en dos variantes. La primera es “El viaje” que nos presenta una historia que comienza años después de lo que conocemos del anime (versión 2018), con el partido entre Japón y Alemania. El protagonista es Tsubasa, teniendo un flashback a la época de secundaria, cuando Roberto Hongo se marcha a Brasil.
Tendremos algunos enfrentamientos clásicos con diferentes escuelas. Aquí existe un detalle importante y es que los partidos formarán parte de la narrativa. Algunos encuentros se podrán “cortar” para mostrar un cinema que es parte clave de la historia, ese elemento nos encanta.
El problema son los diálogos en general, son muchos, muy largos y totalmente innecesarios. La mayoría de las conversaciones se basan en decir quién es mejor, algo que se podrían evitar o simplemente cortarlo para no hacerlo tan pesado.
Inclusive existen fragmentos con un narrador, donde tendremos la pantalla negra y solamente los textos, pero son muchos textos, parecería que les faltó poner una imagen. Es una buena intención, pero en general es mal ejecutado.
En muchas ocasiones la duración de los diálogos podría ser comparable a la de un partido. La campaña también guarda sorpresas con algunas animaciones que sí vale la pena disfrutar en todo momento.
El modo "Héroe" nos permite crear a un jugador desde cero, seleccionar una de las secundarias disponibles y tener una historia más interesante, ya que seremos el chico nuevo de la ciudad. En los diálogos podremos seleccionar algunas respuestas, que solo cambiará la reacción de la otra persona, pero nada más allá.
Aquí el modo de juego es un poco más divertido, ya que en los partidos nos estarán calificando por nuestro rendimiento, así que tendremos que ser precisos en los pases y disparos. En el caso de defender, podremos presionar R3 para seleccionar nuestro personaje y que vaya por el balón, para ser mejor calificado.
Además, cuenta con un componente de RPG, donde vamos evolucionando a nuestro personaje, también tendremos que seleccionar aliados para generar una mejor conexión y con ella realizar momentos especiales como tiros combinados, paredes o pases a larga distancia.
Respecto a la duración de los dos modos, sin problemas supera las 15 horas y si no tienen conflicto con la jugabilidad, se podrían divertir por varios días.
Temporadas en línea
Jugar en línea es uno de los atractivos del juego, destacamos que se puede crear una plantilla, modificando, nombre, logotipo y uniforme. Lo mejor de todo, se pueden crear plantillas con los jugadores del universo de la franquicia.
Similar a ‘FIFA’, el modo en línea funciona con temporadas, donde tendremos un cierto periodo de tiempo para ganar la mayoría de los partidos y estar en los más alto de las puntuaciones, aunque también existen las sesiones privadas si solamente queremos jugar con amigos.
Cada categoría estará dividida por un limite de valor, así que es normal que no encontremos a todos los jugadores al iniciar.
Una oportunidad desaprovechada
Gráficamente el juego luce bien, todos los modelados de los personajes son grandiosos, idénticos a la serie animada, mientras los estadios no son nada del otro mundo. Las animaciones de los jugadores en los diálogos prácticamente es la misma, solo van cambiando los fondos.
Algo que no nos gusta, el narrador de los partidos es japones y todo el partido tendremos subtítulos en la parte inferior con los diferentes comentarios que realiza y es algo imposible de notar. Así que las personas que no saben japonés no entenderán nada en los partidos.
Lo importante de los juegos es la diversión y ‘Captain Tsubasa: Rise of New Champions’ lo logra, pero solamente en algunos momentos. Es un juego exclusivo para los fanáticos de la franquicia.
Si usted busca un juego de fútbol, aquí no estará la opción.
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