La UNAM se pone seria con el uso de drones para diversas tareas específicas. Después de que supiéramos que dicha institución utilizaba Huitzillin (un dron fotográfico) para recolectar datos en sitios arqueológicos, nos enteramos que Huitzilin-2 es utilizado por la misma escuela para vigilar áreas de reservas naturales.
Dicha aeronave es la encargada de sobrevolar las 237 hectareas de la Reserva Ecológica del Pedregal de San Ángel (REPSA) para monitorear el estado de su flora, fauna, y la presencia humana captando imágenes a una altura de entre 10 y 300 metros.
Huitzilin-2 ha colaborado con otras instituciones, como el Instituto de Geografía, en actividades específicas, aunque su objetivo futuro es que pueda ayudar completar el mapa de Ciudad Universitaria, que parece no ha sido actualizado desde el 2012.
Vemos como son las instituciones educativas aquellas que están impulsando el uso de drones para ciertas actividades, así que sólo es cuestión de tiempo para conocer cómo algunas empresas, u otras instituciones, hacen uso de ellos. Probablemente en un futuro esto implique algún tipo de regulación. Sólo el tiempo lo dirá.
Imagen | Don McCullough