El mercado negro en China es un peligro latente para el jaguar en México. La Alianza Nacional para la Conservación del Jaguar en México daba cuenta de ello cuando aseguraba que partes de un ejemplar se venden a menudo en el mercado chino.
La demanda se ha traducido en el incremento de la caza furtiva. Se ha dicho que los colmillos se utilizan para joyería, su piel para ropa o alfombras y sus huesos para medicina china.
Ahora, se suma a la lista los genitales del jaguar. A Reforma, el jefe de Departamento de Ciencias Ambientales de la UAM Unidad Lerma ha dicho: "Lo que sí ha sucedido últimamente con la entrada del mercado chino es la parte delicada, porque van en busca del pene del jaguar por una cuestión afrodisíaca"
México: bastión de la defensa al jaguar
La Alianza Nacional para la Conservación del Jaguar (ANCJ, por sus siglas) coincide. Su vicepresidente, Heliot Zarza, confirma que encontraron a finales del 2019 un ejemplar sin pene en la Selva Lacandona. El tratamiento ha sido visto antes en cazas en Bolivia y Perú.
Con la caza furtiva estallando, Zarza dijo que se le ha pedido a la Guardia Nacional que intervenga, enviando a elementos que solían formar parte de la Gendarmería Ambiental. Ese cuerpo pertenecía a la Policía Federal, de forma que el cuerpo se ha integrado por completo a la Guardia Nacional.
Serían ellos, a decir de Zarza, quienes podrían dirigir medidas ambientales para disminuir el tráfico de la especie al sureste del país.
El Jaguar es el felino más grande de todo el continente. Es el tercero del mundo solo seguido del león y el tigre. Está principalmente en las selvas tropicales del sureste de México y puede alcanzar los 130 kilos de peso. Actualmente está en peligro de extinción principalmente por su caza.
El Fondo Mundial para la Naturaleza ha diseñado medidas para impulsar la protección de la especie. Presentadas como parte de un estrategia con objetivos para 2030, el 'Plan Jaguar' busca fortalecer el Corredor Jaguar, que se extiende desde México a Argentina.
El Jaguar se ha extinguido por completo en El Salvador y Uruguay. Los bastiones clave para su recuperación son Costa Rica, Brasil, Belice y México.