El consumo de diésel en China está en caída libre. Esta tendencia se debe al rápido crecimiento de los camiones propulsados por gas natural licuado (GNL), una tecnología más económica y sostenible.
Las ventas de estos camiones aumentaron un 307% en el último año. Este cambio no solo impacta al mercado chino, sino que también amenaza con frenar la demanda global de petróleo, justo cuando la economía mundial lucha por estabilizarse, según información de Reuters.
El uso de GNL en el transporte pesado es una alternativa atractiva frente al diésel. Aunque un camión GNL cuesta 80,000 yuanes más que uno diésel, aproximadamente 225,557 pesos, el ahorro operativo permite recuperar esta inversión en menos de 200 días. Según Horizon Insights, los costos de combustible de GNL rondan los 1.7 yuanes por kilómetro, frente a los 2.8 yuanes del diésel.
Este cambio, sumado a una economía debilitada y a un sector inmobiliario en crisis, ha provocado que la demanda de diésel en China disminuya entre un 2% y un 7% en el segundo semestre de 2024, según estimaciones de consultoras como consultora Wood Mackenzie.
"La demanda de diésel es el sector más lento dentro de la demanda de petróleo en el segundo semestre, con un desplazamiento significativo... en el sector del transporte por carretera".
Xia Shiqing, consultor de Wood Mackenzie.
Volvo FH.
El impacto trasciende fronteras. China, durante años, fue un motor de crecimiento para la demanda mundial de petróleo. Sin embargo, esta transformación está ralentizando los mercados globales. La Agencia Internacional de Energía (AIE) ha reducido constantemente sus pronósticos de consumo de petróleo en China. Esto, combinado con los aranceles impuestos por Estados Unidos, ha frenado tanto el sector manufacturero como el de transporte.
"El sector manufacturero de China está empezando a desacelerarse, según las cifras del PMI, especialmente porque su modelo de crecimiento 'impulsado por las exportaciones' ya no es sostenible",
Según Zameer Yusof, analista de Kpler.
Vehículos propulsados por nuevas energías que generan paradigmas
A medida que los camiones GNL ganan terreno, se estima que cada vehículo desplaza la demanda de 13 toneladas métricas de diésel anuales. Consultoras como Kpler pronostican que el gas natural licuado podría eliminar entre 110,000 y 140,000 barriles diarios de la demanda global de diésel para 2025.
Esta transición energética es un golpe para las refinerías, que ya han reducido su producción de combustibles fósiles debido a la baja demanda interna. No hay duda, la evolución del mercado chino redefine las dinámicas globales.
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