Con todas las redes sociales adoptando el modo de "Stories", parece un buen momento para apostar por nuevas formas de producir contenido, sobre todo en video.
La app Musical.ly quiere hacerlo a través de invertir 50 millones de dólares para expandirse en Estados Unidos, México y Latinoamérica; dinero que se destinará principalmente a cuatro ámbitos: otorgar becas en universidades, generar programas de innovación con creadores digitales, una plataforma de comercialización y la proyección de talento digital.
Una (nueva) app para gobernarlos a todos
Musical.ly, es una app para crear, compartir y consumir videos cortos sobre cualquier temática, desde cocina, hasta deportes, pasando por comedia. Se trata de una aplicación muy enfocada en el sector juvenil, pues su público meta son adolescentes y adultos jóvenes de entre 16 y 24 años de edad.
La aplicación incluye herramientas básicas de edición y ahora, con la última actualización, una biblioteca de audio con hasta 300 sonidos; los usuarios podrán elegir si mezclarlos con el audio original del video o simplemente insertarlos reemplazando el audio de origen.
Musical.ly llegó a México en abril del año pasado y su crecimiento ha sido desmedido. De acuerdo a Stefan Henrich, director regional en Latinoamérica y España, tan solo en México 4 millones de videos se suben mensualmente a la plataforma. Además, con corte a mayo del 2017, Musical.ly tenía 200 millones de usuarios de todo el mundo.
La inyección de capital para invertir en la expansión de Musical.ly tiene sentido, pues en noviembre del año pasado The New York Times informó que la empresa había sido comprada por entre 800 y 1,000 millones de dólares por la empresa china Bytedance Technology.
El competido mercado de las apps para videos cortos
Pese a que los numeros de Musical.ly son estratosféricos, si algo hemos aprendido en los últimos años es que no son promesa de que estamos ante el nuevo titán de las redes. Como muestra ahí está Vine, que se vio inmersa en la feroz competencia contra Snapchat, e inevitablemente perdió.
Como si al mercado de las apps le gustara la ironía, algo similar le ocurre a la app del fantasmita desde que Instagram y compañia comenzaron a simular el popular modo de "Stories", colocando a Snapchat en una posición peligrosa.
¿Habrá espacio para una app social más, entre todo el abanico de opciones que ya usamos?