Varios casos de hepatitis infantil de origen desconocido están siendo hallados en Reino Unido, España, Israel, Dinamarca, Italia, Estados Unidos y otros países más. El tema se ha vuelto, dice la Organización Mundial de la Salud, "prioritario" y "urgente".
Los casos hasta ahora se concentran en niños menores de diez años cuyos expedientes médicos muestran ningún antecedente relacionado con hepatitis. Detrás de los casos aproximadamente 190 casos que han sido notificados en las últimas semanas no hay ninguno de los virus habituales causantes de hepatitis infecciosa.
"Es muy urgente y le estamos dando prioridad absoluta a esto y a trabajar muy estrechamente con el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades en la gestión y coordinación" dijo el director regional de emergencias de la OMS, Gerald Rockenschaub. Entre las acciones anunciadas, la OMS dice estar trabajando con países para identificar rápidamente casos nuevos.
En el caso de Estados Unidos hace unos días fue activada una alerta nacional para advertir a médicos para que estuvieran atentos a los síntomas de la hepatitis. Mientras tanto, en España, ya existe un caso en el que se ha requerido de un trasplante de hígado, según retoma El País del Ministerio de Sanidad.
Por ahora pocas pistas hay sobre el causante de los casos de hepatitis infantil. El principal sospechoso es el adenovirus F41 que se ha asociado antes con infecciones gastrointestinales en niñas y niños. El adenovirus en realidad no tiene ningún grado de rareza pues suele estar detrás de numerosas infecciones niñas y niños y, de hecho, existen fuentes que relacionan casos de hepatitis con la presencia de algunos adenovirus. Aunque las teorías apuntan al adenovirus F41 como el culpable de los casos de hepatitis infantil, todavía no hay conclusiones definitivas sobre si en efecto es el causante y, en todo caso, por qué los casos se han disparado ahora.