El café es una de las bebidas más consumidas alrededor del globo. Solo en 2023, se consumieron poco más de 178 millones de bolsas de 60 kilogramos, según lo mostrado por Statista. Aunque siempre se han asociado efectos negativos con esta bebida, muchas personas no podemos comenzar el día sin una taza de café, y lo cierto es es una opción más saludable para consumir en lugar de agua.
Al menos eso se encontró en un estudio publicado por el Departamento de Nutrición de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Harvard. Entre los beneficios del café no solo está el de despertarnos por las mañanas.
Como no solo de agua vivimos, la Universidad de Harvard se dio a la tarea de investigar sobre bebidas tan saludables como el líquido vital de nuestro planeta. En el estudio podemos encontrar dos alternativas tan saludables como el agua, siendo los dos candidatos el café y el té.
¿El café es saludable?
Aquí seguro saltan las alertas de algunas personas que no son fanáticas del café debido a su componente más popular: la cafeína. La ciencia contemporánea ha investigado mucho acerca de este compuesto, y ha dejado claro que asociar al café con problemas cardiovasculares, e incluso cáncer, no es más que un mito. De hecho, se ha demostrado que el café puede disminuir el riesgo en ciertos tipos de cáncer si se consume con regularidad.
Además de ser una bebida rica en cafeína, el café también contiene vitamina B2, magnesio y diversos compuestos de plantas como polifenoles, ácido clorogénico y ácido quínico. Según lo compartido por Harvard, una taza de café de 225 gramos contiene aproximadamente 95 miligramos de cafeína. Se considera que una cantidad moderada de café oscila entre las tres y las cinco tazas al día, con un promedio de 400 miligramos de cafeína.
Sin embargo, el estudio recalca que algunas personas pueden no ser tolerantes a ciertas cantidades de cafeína debido a síntomas como ansiedad, insomnio o nerviosismo. Asimismo, se recomienda que las personas embarazadas limiten su ingesta de cafeína a menos de 200 miligramos por día, pues esta puede pasar a través de la placenta al feto.
Regresando a las bondades del café, ayuda a despejar la mente y quitar el sueño mitigando la adenosina. También activa la dopamina, neurotransmisor que regula el estado de ánimo, el control del movimiento y que puede potenciar la memoria y el aprendizaje. Su equilibrio adecuado es crucial para mantener la salud mental y física, por lo que beber café es una buena manera de mantener buenos niveles de dopamina.
Así que ya sabes qué decir cuando te digan que el café es malo para ti. La Universidad de Harvard ha demostrado que el café, lejos de ser perjudicial, puede ser una opción saludable para incluir en tu dieta diaria. Además, ofrece una serie de beneficios que van más allá de simplemente despertarnos por las mañanas.