Los gigantes tecnológicos de Estados Unidos apuestan por México como el próximo centro neurálgico para la fabricación de chips de inteligencia artificial (IA). Según una publicación reciente de WSJ, esta decisión no solo busca diversificar la producción fuera de China, sino también aprovechar las ventajas del acuerdo de libre comercio entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC).
Foxconn, conocido por ser el mayor fabricante de productos electrónicos por contrato del mundo, ha respondido a la demanda de las empresas estadounidenses incrementando sus inversiones en México. Con 690 millones de dólares en los últimos cuatro años y la adquisición de un terreno en Jalisco por 27 millones de dólares, Foxconn está expandiendo significativamente su producción de servidores de IA.
Gigantes tecnológicos ponen la mira en México
Según el informe, empresas líderes como Nvidia, Amazon, Google y Microsoft están utilizando las instalaciones de Foxconn en México para satisfacer sus necesidades de servidores de IA. Este movimiento es parte de una estrategia más amplia para reducir la dependencia de las cadenas de suministro de China, considerado un adversario político de Estados Unidos.
Según datos de Foxconn, México ha demostrado ser una inversión rentable, reorganizando el comercio internacional con las importaciones desde el país y ha superado a las de China por primera vez en dos décadas. Sin embargo, el país enfrenta desafíos como altas tasas de criminalidad y competencia salarial por trabajadores calificados en el ensamblaje de alta tecnología.
No obstante, México ha atraído no solo a los fabricantes de hardware de IA, sino también a varios fabricantes de automóviles. Según datos publicados por la Organización Internacional de Fabricantes de Vehículos Motorizados (OICA), la fabricación de autos en México experimentó un incremento del 14% en comparación anual y alcanzó la cifra de aproximadamente 4 millones de unidades en 2023. Cifra que marcó un año de notable crecimiento para el sector automotriz del país.
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Naturalmente, esto también implica una tendencia general dentro de la industria hacia el “nearshoring” como estrategia clave, acercando la producción a los mercados principales para agilizar entregas, mejorar la transparencia de la cadena de suministro y optimizar la eficiencia operativa. Con gigantes tecnológicos a la vanguardia, redefiniendo sus estrategias de manufactura, es probable que veamos una transformación significativa. Este movimiento podría inspirar a más empresas a explorar centros de fabricación alternativos que prometen ventajas estratégicas y económicas para México.
La respuesta de China ante las restricciones
Ante el endurecimiento de las restricciones por parte de Estados Unidos y sus aliados, China está preparando su industria de semiconductores con un fondo de chips de 27,000 millones de dólares. Este fondo busca acelerar el desarrollo de tecnologías de vanguardia y reafirmar el liderazgo de China en el mercado mundial de semiconductores.
La reubicación de las operaciones de IA a México por parte de titanes tecnológicos de Estados Unidos señala un viraje crucial en la fabricación mundial de hardware de IA. Este movimiento, que trasciende lo tecnológico, es un indicativo de los cambios en comercio y geopolítica, propios de la era digital. A medida que esta tendencia se consolide, México se posicionará como un núcleo de manufactura de alta tecnología, generando nuevas oportunidades económicas y de innovación para la nación y sus áreas aledañas.
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