Una pequeña anécdota personal para empezar (si me disculpan), cuando yo estaba en 5º año de primaria, mi maestra le dijo a mi mamá: "Señora, Tania es demasiado inteligente, debería enviarla a Monterrey a una escuela para niños superdotados", y aquí entre nos, me alegro de que mi madre no lo haya hecho, pues tuve la oportunidad de desarrollarme como cualquier otro niño y la maestra tuvo que lidiar conmigo, gajes del oficio, pero ser un niño genio, con un coeficiente intelectual superior a los 130 puntos, ser mexicano e ir a Dinamarca a un Congreso Mundial de Niños Superdotados, no es algo con lo que tuvo que lidiar mi maestra.
Nueve niños mexicanos, que podrían considerarse niños genios, fueron a Dinamarca a presentar proyectos de investigación de robótica y tecnología espacial en un encuentro académico en la ciudad de Odense. Ellos forman parte del Centro de Atención al Talento, fundado en 2010. Aproximadamente un 3% de la población infantil a nivel mundial, cuenta con esta inteligencia sobresaliente, pero no siempre son diagnosticados correctamente y en consecuencia, muchas veces su talento se ve desperdiciado.
Estos "niños genio" se encuentran llevando a cabo un proyecto de Robótica y Tecnología Espacial, avalado por la Agencia Espacial Mexicana, el proyecto consiste en hacer un CANSAT (un satélite en lata" que según Andrew Almazán Anaya, director del área de Psicología del Cedat:
“Se trata de introducir lo último en tecnología y robótica al aprendizaje de los niños sobredotados para que ellos desarrollen proyectos novedosos con su talento excepcional y la presentación será en el foro más importante a nivel internacional en materia de investigación en sobredotación intelectual infantil”
Estos pequeños en edad pero gigantes en inteligencia se pusieron manos a la obra para programar microcontroldores, sensores y dispositivos de radiofrecuencia, y lograron con ayuda de sus asesores tener su CANSAT listo para ser lanzado y pilotado desde un centro de control en tierra, con él se harán diferentes pruebas para comprobar el nivel alcanzado por nuestros genios mexicanos.
Como les decía en un principio, mi maestra no tuvo que lidiar con niños genio, solo con mi propio genio que dicho sea de paso, está bastante domesticado. Lo importante aquí, es saber que en nuestro país contamos con un Centro de Atención al Talento, donde los niños con inteligencia superior a la media, pueden ser atendidos, descubrir sus talentos y ponerlos a trabajar al servicio de los demás.
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