Las ventas de autos eléctricos en China están rompiendo récords y ya tienen un impacto en la demanda mundial de petróleo reporta The Economic Times. En octubre de 2024, el país vendió 1.4 millones de vehículos electrificados, lo que marcó un nuevo hito en el sector. La Agencia Internacional de la Energía (IEA) y la Administración de Información Energética de EE.UU. (EIA) han identificado este fenómeno como una de las principales razones detrás de la desaceleración del consumo de petróleo en China.
La tendencia sugiere un cambio estructural en el mercado de energía global. China ha sido históricamente el principal impulsor del crecimiento en la demanda de petróleo, y es responsable de más del 60% del incremento mundial desde los años 70. Sin embargo, en 2024, ese patrón cambió. Se estima que el consumo de petróleo en el país solo aumentó un 1.1%, lo que equivale a 180,000 barriles diarios, una cifra considerablemente menor en comparación con años anteriores.
La caída en el refinamiento de combustibles también es evidente, con reducciones de hasta el 13% en algunas refinerías, según Reuters. Este fenómeno se debe en parte a la desaceleración económica y a la reducción en la logística de transporte de mercancías. El verdadero protagonista de este cambio es el auge de los vehículos eléctricos e híbridos enchufables.
En China, más del 50% de los automóviles vendidos en 2024 pertenecen a esta categoría, lo que ha reducido significativamente la necesidad de gasolina y diésel. La IEA estima que este cambio disminuirá la demanda mundial de petróleo en 400,000 barriles diarios. La transición energética está avanzando más rápido de lo esperado y China está en el centro de este proceso.
La expansión del tren de alta velocidad en China es otro factor clave. En 2024, el número de pasajeros que usaron este medio de transporte aumentó un 6.2% en comparación con el año anterior, transportó a 872 millones de viajeros. La infraestructura ferroviaria seguirá creciendo con 15,000 kilómetros adicionales de vías antes de 2030. La combinación de estos factores transforma la movilidad en el país y disminuye su dependencia del petróleo.
Tren bala.
El futuro del pretroleo en China y Europa
Mientras tanto, los analistas predicen que para 2025 el crecimiento en la demanda de petróleo en China vendrá principalmente de la industria petroquímica y no del transporte. Esto marca un punto de inflexión en la relación histórica entre el crecimiento económico y el consumo de petróleo del país asiático.
La pregunta ahora es si esta tendencia se replicará en otros mercados y qué impacto tendrá en la economía global en los próximos años. En Noruega, por ejemplo, ya se planteó la idea de prohibir los vehículos de combustión interna en 2025 . Este cambio no es un hito ambiental, también es paso estratégico para eliminar la dependencia del petróleo e incentivar la movilidad sostenible.
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