En 2004 estrenó una de las películas más emblemáticas y taquilleras en la carrera de Brad Pitt. Rodeado de un elenco multiestelar, el actor encarnó al héroe de la mitología griega, Aquiles. Entre espadas, flechas y escudos, lo vimos luchar en playas que emularon la épica guerra de Troya. Lo curioso es que Pitt y el resto de la producción no pisaron Grecia para filmar, sino un destino paradisiaco en México.
Basada vagamente en La Iliada de Homero, la película nos transporta al año 1193 a.C. cuando el joven Paris rapta a la reina Helena. Gracias a este hecho, se desencadena una lucha entre griegos y troyanos. Si bien dicho conflicto estalló en las afueras de la ciudad de Troya, hoy Hisarlik, Turquía, la realidad nos revela que, dentro del metraje, Aquiles lideró los ataques en nada menos que Los Cabos, Baja California Sur.
Los Cabos. Aunque hoy en día es uno de los destinos turísticos más visitados en México, este fue el lugar idóneo para retratar las batallas griegas. Según cuenta el búlgaro Krassimir Terziev en su documental Batallas de Troya, esta decisión se debió a que originalmente se pensó grabar en Marruecos, pero las tensiones de la guerra de Irak hicieron que el equipo optara por trasladarse a México.
Fue así que llegaron a El Salto del Caribe. Ubicado sobre un arroyo seco, es una zona árida caracterizada por su arena casi rojiza y suele ser visitada para pasear en cuatrimotos o motocicletas. En este lugar, se rodó el icónico combate inicial entre Aquiles y Boagrius.

Faro Viejo. Otra gran escena que podemos recordar de la película es el momento de la invasión griega en la playa de Troya. Durante la secuencia, los barcos llegan a la costa con los troyanos a la espera de un enfrentamiento. Por sus dunas y ambiente cálido, la producción recurrió a la zona del Faro Viejo para rodar gran parte del filme. Vale la pena mencionar que actualmente se encuentra cerrado al público.
Para llevar a cabo las batallas colosales, participaron alrededor de 1,300 extras que representaron a los 50,000 miembros del ejército griego y los 25,000 guerreros troyanos. Para ello, fueron reclutados expertos militares de Bulgaria, así como otros tantos mexicanos. Ambos equipos entrenaron durante tres semanas bajo temperaturas que superaron los 38 grados Celsius.

Como último dato, las playas en las que se rodó fueron El Médano, Santa María y El Chileno. Todas son conocidas por sus aguas cristalinas y belleza natural. De hecho, existen tours turísticos que pueden llevar a estas zonas. Ahora sabes que el Océano Pacífico y las costas mexicanas representaron al mediterráneo en uno de los episodios más conocidos de la historia griega en la obra de Wolfgang Petersen.
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