Hyundai no va a improvisar frente a las presiones comerciales de Estados Unidos. Durante la 57ª Reunión Anual de Accionistas, celebrada en Seúl, el presidente global de la compañía, José Muñoz, declaró que el grupo automotriz surcoreano tiene una estrategia concreta para enfrentar cualquier arancel que pudiera imponer una nueva administración encabezada por Donald Trump. Aparentemente la planta Metaplant America, ubicada en Georgia, fue parte de esa preparación desde su origen. No fue una respuesta a las amenazas de ahora. Fue una jugada pensada desde la primera presidencia de Trump.
Hemos preparado la empresa para afrontar las incertidumbres macroeconómicas y geopolíticas de este año. La compañía y sus socios están invirtiendo 12.600 millones de dólares en una planta de ensamblaje y dos empresas conjuntas de baterías, lo que permitirá aumentar la capacidad de producción. La decisión de realizar esta inversión se tomó durante la primera administración Trump. Nuestra estrategia de localización en este importante mercado estadounidense ayudará a mitigar el impacto de cualquier posible cambio de política.
José Muñoz, presidente y director ejecutivo de Hyundai Motor Company.
Parece que con esa declaración, Muñoz no solo respondió de forma diplomática a las tensiones comerciales. También dejó claro que Hyundai anticipó los riesgos geopolíticos y que no se va a frenar en 2025. La fábrica estadounidense producirá modelos eléctricos como el Ioniq 5 y el futuro SUV Ioniq 9. Pero eso no será todo. La marca también integrará versiones híbridas para mitigar el impacto de posibles aranceles, lo que en teoría les permitirá mayor flexibilidad si cambia el entorno fiscal o político en Washington.
Hyundai quiere dejar claro que no solo se trata de adaptarse. El plan es ganar participación y rentabilidad en cada región. Así lo explicó José Muñoz, al anunciar una estrategia de optimización que considera desde los reguladores europeos hasta los consumidores de Medio Oriente. En Europa, la marca afina el lanzamiento de nuevos eléctricos para cumplir con normas ambientales. En Arabia Saudita, levantará una base de producción semiconductores. En China, el objetivo es responder con eléctricos que entiendan el gusto local, como el Hyundai Casper que cuesta menos de 25,000 dólares, aproximadamente 502,775 pesos.

Aunque suene a discurso institucional, el mensaje tiene fondo: Hyundai está preparando su músculo global para que ninguna decisión externa le tome por sorpresa. Y no se trata de una defensa solitaria. La marca también juega en equipo. Según Muñoz, Hyundai estrecha lazos con gigantes como General Motors, Amazon y Waymo. Esto no solo apuntaría a mantener la innovación competitiva. También reforzaría el mensaje de que el futuro se construye entre varios, aunque cada quien hable su idioma.
Estamos dialogando con la nueva administración de Estados Unidos para reforzar nuestras importantes inversiones, la creación de empleo y el impacto económico. Estamos ampliando la producción en otros mercados en crecimiento y aprovechando asociaciones estratégicas con Amazon, Waymo, General Motors y otros. En EE. UU., los vehículos Hyundai ya están disponibles para su compra a través de Amazon Autos. Somos la primera y, actualmente, la única marca que ofrece transacciones completas en Amazon Autos.
José Muñoz, presidente y director ejecutivo de Hyundai Motor Company.

El plan de negocios de Hyundai para los autos eléctricos y presencia en México
La estrategia para vehículos eléctricos sigue firme. Hyundai invertirá más de 90 mil millones de dólares para lanzar 21 modelos eléctricos antes de 2030. Además, ampliará su portafolio híbrido y construirá 30 mil estaciones de carga en Estados Unidos junto a IONNA. En paralelo, integrará el estándar NACS, creado por Tesla, con la intención de asegurar compatibilidad, presencia y eliminar la denominada ansiedad de carga de los conductores. Algo parecido a lo que BYD propone con su nuevo sistema de supercarga 1000 kW.
"Ante la incertidumbre macroeconómica y geopolítica, seguiremos escuchando atentamente a nuestros clientes, socios y constituyentes para asegurarnos de responder a cualquier cambio de manera informada y decisiva, aprovechando toda la fortaleza del Grupo".
José Muñoz, presidente y director ejecutivo de Hyundai Motor Company.
A once años de su llegada a México, Hyundai logró consolidar una red de más de 68 agencias y casi medio millón de vehículos vendidos. Uno de los más recordados es el Accent, un subcompacto que debutó poco después del arribo de la marca al país. Producido desde 2017 en la planta de Kia en Pesquería, Nuevo León, el Accent se convirtió en sinónimo de espacio y funcionalidad para miles de familias mexicanas, hasta su salida del mercado en 2022. Ahora la marca solo fabrica vehículos comerciales en Querétaro.
Según datos de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores, en febrero de 2025 Hyundai se ubicó como la novena marca más vendida en el país, con una participación del 3.4% del mercado. En una industria que no da segundas oportunidades, parece que Hyundai demuestra que su apuesta por México no fue temporal, sino estratégica. Con la llegada de sus modelos IONIQ al país, enfocada exclusivamente en vehículos eléctricos, la firma planea renovar su portafolio de productos en sintonía con las tendencias globales.
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