Estamos de acuerdo en que la PlayStation 2 es una de las consolas más populares de la industria de los videojuegos, y la más vendida en todo el mundo. A pesar de su popularidad, también surgieron rumores de que este dispositivo era usado como herramienta para armamento militar especializado. Sin embargo, con el pasar de los años, llegó su sucesora que mejoraba casi en todos los aspectos. Hablamos de la PlayStation 3, cuyo hardware también fue usado para fines de la armada estadounidense, y se reporta que usaron aproximadamente 1,760 equipos PS3 para esto.
Y es que este fue uno de los proyectos que el gobierno de los Estados Unidos autorizó para construir una supercomputadora con más de 1,000 PlayStation 3 para fines de la armada nacional. Este proyecto se conoció bajo el nombre de Condor Cluster, donde su objetivo era aprovechar las capacidades de este hardware para mejorar el radar, procesar imágenes satelitales y realizar investigaciones de inteligencia artificial, entre otras funciones.
Dicho proyecto tuvo lugar en Nueva York, donde tuvieron a disposición varias unidades PS3 que adquirieron al por mayor, siendo que este plan tuvo un costo de dos millones de dólares, de los cuales, una parte fue dedicada a la adquisición de más de mil unidades de la consola de Sony, la cual, en su lanzamiento inicial, costaba 499 dólares.
Cabe mencionar que estos no eran los únicos hardware ajenos a la armada que el ejército de los Estados Unidos usaba para los fines de sus proyectos, y es que también se dice que 168 tarjetas de video y 84 servidores fueron adquiridos para realizar un aproximado de 500 billones de operaciones por segundo. Hablamos de cálculos matemáticos extremadamente exigentes que cualquier computadora convencional no puede ejecutar.
Sin duda, este proyecto llamado Condor Cluster es uno de los más ambiciosos en cuestión de usar componentes relacionados a los videojuegos. Aunque se trató de gabinetes grandes con cada una de las PS3 apiladas para que estas cumplieran su función, hoy en día esto se trasladó a servidores montados de manera uniforme para hacer dichos cálculos matemáticos y operaciones exigentes.
Cabe mencionar que, respecto a la PlayStation 2, se dice que esta era tan potente en su momento que al gobierno de Japón le preocupó exportarla al exterior por miedo a que se usara como armamento militar. La capacidad gráfica y de procesamiento de la consola era tan avanzada para su época que se temía que pudiera ser aprovechada para aplicaciones militares, como simulaciones de vuelo y control de misiles. Este temor subraya el impacto tecnológico y el potencial de las consolas de videojuegos más allá del entretenimiento doméstico.
Imagen | Nikita Kostrykin en Unsplas
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