Una vez más, el cohete Space Launch System (SLS) de la misión Artemis I ha llegado a la plataforma de lanzamiento, para intentar nuevamente un despegue con rumbo a la Luna.
De acuerdo con la NASA, el cohete y la nave espacial Orion, llegaron a las 6:30 am hora del centro de México, a la plataforma 39B en el Centro Espacial Kennedy, tras un viaje de casi nueve horas desde el Edificio de Ensamblaje de Vehículos (VAB).
Los siguientes pasos, de acuerdo con la Agencia, será seguir configurando ambos vehículos para el siguiente intento de lanzamiento, contemplado para el próximo 14 de noviembre.
Este es ya el cuarto viaje del cohete a la plataforma, tras haber realizado excursiones en marzo y junio para sus pruebas de abastecimiento de combustible, así como una tercera a mediados de agosto para hacer los intentos de despegue, donde se presentaron varios problemas que impidieron hacer el lanzamiento.
El último movimiento del cohete se había hecho a finales de septiembre, para proteger el vehículo del huracán Ian, además de por mantenimiento, para hacer reparaciones y pruebas menores de rutina.
Ventanas de despegue nocturnas
Para esta ocasión, las ventanas de lanzamiento están principalmente contempladas para la tarde o noche. Por ejemplo, para la primera oportunidad, en realidad corresponde a las 10:07 pm, hora de México, del domingo 13 de noviembre, que tendrá una duración de 69 minutos.
Además, se esperan ventanas adicionales de respaldo para el 16 y 19 de noviembre, aunque en caso de que en ninguna de estas dos oportunidades se pueda hacer el lanzamiento, existe una fecha más para el 25 de noviembre.
En este caso, cada fecha tiene también diferente duración. Si se realiza el despegue el 13 de noviembre, la misión será de 25 días y medio, amerizando en el Océano Pacífico el 9 de diciembre, mientras que en otras fechas, el vuelo podría ser de hasta seis semanas.
El tiempo se acaba para el cohete SLS
Además de ver los componentes clave de la misión, los ingenieros de la NASA también están revisando otras partes del cohete, que ha estado completamente apilado en su plataforma de lanzamiento móvil durante más de un año.
Este montaje de los propulsores sólidos de cinco segmentos, comenzó a fines de 2020, y los límites conservadores solamente los certificaron por 12 meses luego de que se apilara el segmento central trasero de cada propulsor sobre la pieza más baja del motor, lo que ocurrió en enero de 2021.
Este límite se ha extendido a 23 meses, gracias a revisiones adicionales y datos de las condiciones de cada propulsor, pero la certificación actual para un impulsor vence el 9 de diciembre y el 14 de diciembre para otro.
Al respecto, Jim Free, gerente de la NASA, señaló en una rueda de prensa, que la agencia probablemente podría extender su vida útil aún más con unos análisis adicionales.
Sin embargo, en caso de que el despegue no se realice en noviembre, pasen las fechas y los propulsores no aprueben las revisiones, la misión Artemis I estaría en camino a ser retrasada nuevamente.