En CDMX, es común ver una gran cantidad de automóviles que circulan con placas de Morelos. Esta tendencia tiene su origen en la eliminación de la tenencia vehicular en dicho estado desde 2012, lo que ha incentivado a muchos propietarios de vehículos, especialmente de lujo, a emplacar allí para evitar este impuesto.
Hay que recordar que en CDMX solo están exentos del pago de tenencia los vehículos cuyo valor no supera los 250,000 pesos, lo que deja fuera a la gran mayoría de los automóviles, especialmente a los alta gama.
Este fenómeno no es fortuito, ya que en muchas ocasiones las propias agencias de vehículos ofrecen a los compradores la opción de emplacar en Morelos para ahorrar dinero en la compra. Sin embargo, esta práctica es ilegal, ya que en 2022 se realizó una reforma al artículo 160 del Código Fiscal que obliga a las personas que vivan en CDMX a emplacar sus autos en la capital. La multa por no cumplir esta condición va desde los 521 pesos hasta los 911 pesos.
Además de la eliminación de la tenencia, otro factor que incentiva esta práctica es que Morelos forma parte de la Comisión Ambiental de la Megalópolis, lo que permite a los autos con placas de este estado circular sin problemas en la CDMX, siempre que cuenten con el holograma de verificación adecuado.
Sin embargo, esta situación genera serios problemas. En primer lugar, el Gobierno de CDMX deja de recaudar millones de pesos en impuestos, lo que afecta sus finanzas públicas. En segundo lugar, algunos vehículos con placas de Morelos evaden las fotomultas en CDMX, lo que puede derivar en un problema de seguridad vial debido el exceso de velocidad.
Muchos vehículos superdeportivos se emplacan en Morelos
¿Una práctica que beneficia a Morelos?
A pesar de las desventajas, existe una pequeña ventaja en esta práctica: los propietarios de autos con placas de Morelos no están exentos de la verificación vehicular, por lo que más de un millón de personas deben acudir periódicamente a ese estado para realizar sus trámites.
Calles del Centro de Cuernavaca, Morelos
Esto genera un éxodo masivo de personas, que muchas veces aprovechan la oportunidad para realizar actividades vinculadas al turismo, lo que en teoría beneficia algunos sectores de la economía local de Morelos, especialmente los relacionados con la gastronomía, entretenimiento y alojamiento.
Imagen | El Sol de Cuernavaca
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