Una combinación entre un lector electrónico y un Game Boy. Esa es, sin duda, una de las ideas que tuvo en mente Daniel Pucha, un empresario que decidió crear Ink Console, un dispositivo que fusiona lo mejor de ambos mundos.
A diferencia de otros equipos, este dispositivo no cuenta con una pantalla a color de alta frecuencia de actualización ni con un gran rendimiento. En su lugar, ofrece especificaciones modestas, pero con un propósito claro: ejecutar su propio tipo de juegos y, al mismo tiempo, permitir la lectura de libros.
Una consola, pero para jugar libros
Actualmente, el proyecto está a punto de ser lanzado a través de una campaña en Crowd Supply. Ink Console cuenta con una pantalla de tinta electrónica de 7.5 pulgadas y una resolución de 800 × 480 píxeles, además de una batería recargable de 5,000 mAh.
El dispositivo incluye un joystick analógico que facilita la navegación por los distintos menús e incorpora un kit de desarrollo para la creación de juegos específicos. Estos pueden ser utilizados de manera personal o compartidos con otros usuarios. También dispone de un lector de tarjetas SD para ampliar su capacidad de almacenamiento.

Es importante destacar que los juegos de Ink Console no se asemejan a los de otras consolas. En su lugar, pertenecen a la categoría de libros tipo "elige tu propia aventura", donde cada página presenta ubicaciones o eventos distintos antes de ofrecer diferentes opciones de acción al jugador.
En el formato físico tradicional, el usuario debía pasar las páginas y seguir las instrucciones para continuar con la historia o, en caso de tomar una decisión equivocada, perder la partida. Este concepto se mantiene en Ink Console, pero adaptado a un entorno digital.
Libros digitales interactivos en formato de cartucho
La motivación detrás de este proyecto, explica Pucha, conocido también como Dana, es desarrollar un dispositivo capaz de reproducir y leer este tipo de libros interactivos. Aunque aún se encuentra en fase de prototipo, ya incorpora una gran variedad de funciones.
Para adquirir nuevos títulos, será necesario comprarlos en forma de cartucho, similar a los juegos de la Game Boy. Dana los ha denominado Gamebooks, y actualmente se trabaja en un kit de desarrollo para la creación de nuevas historias y juegos de rol basados en texto.

Por el momento, la campaña de financiación colectiva aún no ha comenzado, por lo que se desconocen el precio de Ink Console y el costo de los Gamebooks adicionales en caso de que el proyecto logre alcanzar su meta.
Entrar y enviar un comentario