Si tienes cáscaras de huevo no las tires a la basura, tienes un tesoro: así te ayudan con las plagas de tu jardín

Hay trucos que nos cambian la vida. No solo se trata de hacer cosas más fáciles, rápidas y con menos esfuerzo; se trata de tener trucos para resolver complicadas situaciones en la vida. 

Cosas que puedes comprar como el insecticida ideal, o bien, como evitar que las plagas entren a tu hogar. En este largo recorrido de consejos, llegamos a uno de los más importantes, "para qué sirven las cáscaras de huevo y qué hacer con ellas".

Usos de las cáscaras de  huevo

El huevo es uno de los productos de cocina más comunes en los hogares; en muchos países es el desayuno definitivo. Aunque la costumbre es tirar las cáscaras, no deberías hacerlo, pues este recurso ecológico ofrece la oportunidad de mejorar la salud de tus plantas gracias a sus diferentes propiedades y usos. De hecho, entre sus principales funciones para jardinería se encuentran:

• Combatir plagas: Para esto, solo necesitas esparcir trocitos pequeños de cáscara de huevo alrededor de la zona de tu jardín o de la maceta que tenga problemas de plagas de caracoles o babosas. La cáscara ayuda a crear una barrera que las babosas o caracoles no querrán cruzar, debido a que estos no toleran pincharse con las puntas y les resulta molesta la textura.
• Hacer una composta: No solo deberás agregar las cáscaras de huevo, sino que este ingrediente será el adicional para que tu composta sea más rica y completa.
• Hacer un fertilizante del suelo: Si quieres calcio para tus plantas, utiliza cáscaras de huevo. Solo tritúralas y colócalas en el sustrato que utilices. El calcio es uno de los minerales más ricos para mejorar el desarrollo de tus plantas. Por ello, muchos optan por añadir cáscara de huevo para ayudar a que los cultivos prevengan la podredumbre. Quizá recuerdes que tus tíos, abuelas y demás tenían sus macetas con pequeños trozos de cáscara y no sabías por qué.
• Reducir la acidez del suelo: Si tienes plantas que requieran un tipo de suelo específico para su crecimiento, controlar la acidez del suelo puede ser tu mejor opción, y para lograrlo, las cáscaras de huevos molidos son vitales. Debes recordar que el agua de los riegos facilitará la liberación de los componentes de las cáscaras en el suelo.