Los reflectores de hoy se los ha llevado Samsung, la empresa surcoreana por fin nos ha mostrado su segundo teléfono más importante para este 2018, el mismo que viene a renovar la tan querida línea Note de su catálogo.
Samsung Galaxy Note 9. Su nombre no nos dice mucho, tan solo nos deja en claro que es una nueva versión de su línea de phablets que, una vez más, quiere marcar tendencia. Una que quizá no guste a la mayoría. La de los smartphones de 30,000 pesos.
El dilema: cada vez hay menos diferencias entre flagships
La empresa ha confirmado que el precio del Galaxy Note 9 en su versión con más RAM y almacenamiento, será de 29,999 pesos en México, si optamos por la de menor RAM y capacidad el costo bajará a los 24,999 pesos. El primero es elevado —no voy a negarlo— pero el segundo es uno que ya no asusta, es similar por el que Apple nos venía el iPhone X y ligeramente mayor al del Galaxy Note 8 del año pasado.
Pero ¿qué nos ofrece Samsung por esos 30,000 pesos? Un procesador de última generación (un Snapdragon 845 en nuestro país), 8GB de memoria RAM, un par de cámaras traseras (una de ellas con apertura variable), batería de 4,000 mAh y una panel AMOLED curvo de 6.4 pulgadas con resolución QHD+.
Una lista de especificaciones que, quizá para algunos, se lean impresionantes, pero que en realidad se alinean con lo que ofrece el mercado de la gama alta en la actualidad. Eso sí, hay algunos features con los que Samsung quiere marcar diferencia.
512GB de capacidad en un teléfono es algo que hace años se vislumbraba lejísimos, la firma surcoreana no es la primera que integra esta capacidad en un equipo, pero es la primera que lo hace para un smartphone enfocado al mercado tradicional. Además, mantiene la posibilidad de usar tarjetas microSD de hasta 512GB. O sea, podremos tener 1TB de capacidad.
Pero creo que el verdadero valor de este Galaxy Note 9 es, una vez más, su S Pen. Este pequeño accesorio ha sido un ícono de la línea Note, siendo así mismo una de las razones por las que muchos usuarios optan por este modelo. Lo mejor es que Samsung lo ha potenciado: ahora se comunica con el teléfono vía Bluetooth e integra funciones adicionales, por ejemplo, lo podemos usar como obturador de la cámara y como botón de control de diapositivas.
¿Son las únicas dos características diferenciales respecto a la competencia? a mi parecer sí, ya que sobre el papel todas las demás especificaciones las podemos encontrar en otros equipos de gama alta y, en algunos casos, en smartphones que cuestan una tercera parte del precio de este Note (importándolos de otro país, claro).
Pero hay gente que necesita de estos smartphones
Tenemos que aceptarlo, el precio del Galaxy Note 9 es elevado, pero Samsung sabe que hay un nicho de mercado esperándolo, sabe que hay gente que no dudará en pagar esos 30,000 pesos por el equipo y, mejor aún, sabe que habrá gente que le sacará provecho a todas las funciones adicionales que integra, y hablo específicamente de las adicionales, porque por el precio del smartphone lo que se espera es tener una cámara, pantalla y rendimiento espectacular, digno de la gama alta, si alguno de estos apartados tiene fallas, entonces habrá problema.
Creo que es momento de empezar a reflexionar, y debatir, sobre hacia dónde se dirige la gama alta en México, más sabiendo que muchos usuarios satisfacen sus necesidades con un equipo de 5000 pesos (o menos) y cuando las diferencias entre teléfonos de gama alta son pequeñísimas obligándonos a tomar el precio como el principal punto de decisión de compra. Esto último es más notable en el lanzamiento de hoy: este Galaxy Note 9 tiene competencia dentro de su misma casa, un Galaxy S9+ que sobre el papel es bastante similar y que dentro de poco empezará a bajar de precio.
Hace un año nos sorprendíamos de tener smartphones de más de 20,000 pesos, hoy le damos la bienvenida a los smartphones de 30,000 pesos ¿cuál será el objetivo para 2019?.
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