Internet ya en algunas ocasiones nos ha demostrado que es posible realizar algunos cambios en el país utilizando este medio, y por ello Sergio y Daniel crearon al Candi-gato Morris para protestar en contra de la política tradicional y la corrupción que asecha a México.
De tal forma que el personaje del Candi-gato Morris se postuló como Alcalde en las elecciones del pasado 7 de julio en Xalapa, Veracruz y para su “campaña” uso las redes sociales como medio de difusión.
Ante la cantidad de ratas que acechan esos puestos sólo un gato podrá poner orden. El candi-gato no promete nada más que los demás candidatos: Descansar y retozar
Después de las elecciones todo apunta a que obtendrá cerca del 10% de los votos registrados en el municipio. Por ello, diversos medios de comunicación del país han seguido el avance de su campaña, que solo en Facebook ha captado la atención de más 157 mil usuarios.
Según se comenta, solo en Xalapa ha alcanzado poco más de 600 votos y se espera que logre el 10% del total de los votos computados, superando por mucho las expectativas y hasta partidos políticos como el PRD.
Lamentablemente no podremos saber el número exacto de los votos obtenidos por Morris ya que hasta donde tenemos noticias, en unas casillas los contaron como candidatos no registrados y en otras como nulo
Frente a la preferencia popular los creadores del Candi-gato Morris mencionaron que sería el porcentaje más alto alcanzado por un candidato no registrado en unas elecciones en Xalapa, Veracruz.
Ya que según algunas fotografías que han difundido en Facebook, en las boletas de votación y en el espacio para candidatos no registrados los electores pusieron el nombre del gato y algunos incluso dibujaron huellas o la cara de un gato en sus boletas.
Por su parte, los creadores del Candi-gato mencionaron lo siguiente:
Felicitamos a los verdaderos ganadores de las elecciones: abstencionismo, apatía, corrupción. Gracias al trabajo de personas como Carolina Viveros (presidenta del Instituto Electoral Veracruzano), cómplice de acarreo, compra de votos, micropartidos, ‘izquierdas’ divididas y candidatos que compiten para perder.
Fuente | Animal Político
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