Samsung se encuentra trabajando en un Galaxy S4 a prueba de polvo y agua, un "todo terreno". Será esencialmente igual al Galaxy S4, pero con superpoderes ambientales, según un reporte de The Wall Street Journal.
El periódico también publicó que la siguiente generación de la Galaxy Tab se lanzará en junio junto con un S4 mini de "sólo" 4.3 pulgadas. Sabemos de la tendencia de la sudcoreana de diversificar la línea de su buque insignia, y en esta ocasión no tendría por qué haber una excepción.
El S4 "todo terreno" llevará al buque insignia en una nueva dirección, sin embargo, no es para nosotros desconocido que podría ser una jugada en contra de Motorola que sigue siendo propiedad de Google.
El CEO de Google Larry Page y su presidente ejecutivo Eric Schmidt, han hablado de lo que sigue para motorola, refiriéndose a que los celulares no deberían romperse cuando se caen, o morir cuando son sumergidos en agua, sugiriendo que algunos aspectos clave del futuro hardware de Motorola, será también la capacidad de resistir el impacto de los elementos.
Samsung y Google tienen una relación bastante compleja, y se ha dicho bastante de cómo en ocasiones la compañía sudcoreana ha puesto de nervios a Google, pues tiene un control muy grande sobre el mercado de los smartphones con Android.
Mientras son peras o son manzanas, este nuevo giro al Galaxy S4 ayudará a que Samsung se posicione en las esferas militares y de gobierno, pues claro, al menos nuestros diputados necesitan un buen smartphone que no se les ahogue en el primer charquito donde se les caiga. Pero evidentemente, no están pensando en nuestro país, sino en el vecino país del norte, donde Apple y Blackberry tienen la mayor parte del pastel.
Sabemos que el que pega primero, pega dos veces, entonces, quien primero logre tener un teléfono con estas prestaciones que lo hagan "todo terreno" será capaz de dominar el mercado. Motorola ya lo hizo anteriormente con su Defy, pero la tecnología evoluciona, y ninguna marca puede ni debe a estas alturas del partido, dormirse en sus laureles.
Fuente | Mashable