En Aguascalientes se respira optimismo respecto al futuro de Nissan en México, a pesar de la incertidumbre generada por las posibles tarifas arancelarias que podrían aplicarse a los autos exportados a Estados Unidos. Esaú Garza de Vega, secretario de economía, ciencia y tecnología del estado, destacó en entrevista con LJA.MX, que Nissan mantiene su compromiso con la región y su visión a largo plazo.
“Como saben, ha habido ajustes y cambios, pero se está siguiendo de cerca la negociación que llevan a cabo las autoridades federales. Nos han comentado que sus proyectos tienen una visión a largo plazo, más allá de cuatro años. Aunque estamos atravesando una turbulencia, también surgen oportunidades. Esto significa que, ante cualquier ajuste o reacomodo, la planta seguirá siendo altamente competitiva dentro de la industria”.
Esaú Garza de Vega, secretario de economía, ciencia y tecnología de Aguascalientes.
La planta de Nissan en Aguascalientes no solo es clave para la producción de vehículos que abastecen tanto al mercado nacional como internacional, sino que también se está posicionando como un eje estratégico dentro de la cadena de suministro automotriz. Parece que la compañía japonesa, a través de su planta en Aguascalientes, ha sabido adaptarse a las demandas del mercado global. Según Garza de Vega, uno de los objetivos principales de Nissan es reducir costos y mantener precios competitivos sin sacrificar la calidad de sus vehículos.
Para lograrlo, se está fortaleciendo la cadena de suministros mediante un enfoque local más robusto. Este movimiento es parte de una estrategia integral para evitar los efectos negativos de los aranceles y al mismo tiempo intentar asegurar que la producción local continúe competitiva a nivel global. Además, el gobierno estatal no ha permanecido ajeno a las tendencias y preocupaciones globales.
Aunque los aranceles son un tema importante, se están tomando medidas para garantizar que las empresas automotrices, como Nissan, confíen en México. Garza de Vega mencionó la reciente firma de un convenio con la Alianza Nacional de Autopartes, que tiene como objetivo fortalecer la capacitación y certificación de las empresas locales para integrarlas a la cadena de valor del sector. Esta medida no solo podría traer un mayor contenido local en la producción, sino que también buscaría reducir costos y tiempos de entrega.

Nissan goza de fortaleza en México
Lo más interesante de todo es que Nissan ha logrado diversificar su mercado. No solo abastece a Estados Unidos, sino que también se ha consolidado como la marca de vehículos más vendida en México por más de una década. Gracias a su fuerte presencia local y su estrategia de integración, la planta de Aguascalientes se ha convertido en una de las más productivas a nivel internacional. Si bien los aranceles podrían aumentar los costos para los consumidores estadounidenses, la estructura sólida de Nissan en México le permite sortear mejor los obstáculos impuestos por las fluctuaciones comerciales.
Aguascalientes no solo ve a Nissan como una fuente de empleos, sino también como un componente de su economía. Con proyectos de inversión y la búsqueda de mejorar la producción local, el estado buscará generar las condiciones adecuadas para que Nissan México mantenga el paso positivo, sin importar los desafíos internacionales que puedan surgir.
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ramonyo
Nissan apostó por México cuando comenzó su expansión internacional y está posicionada como una empresa confiable para el mercado mexicano. Si Drumpf impusiera aranceles a las exportaciones mexicanas (cosa que está en veremos) Nissan tendría que ser inteligente y reorganizar su producción para intentar pagar lo menos posible fabricando en Estados Unidos aquellos vehículos que se consumen allá. Nissan no tiene la capacidad de abandonar sus plantas en México e ir a construir otras en Estados Unidos.
Hay quienes piensan, de manera ingenua, que Nissan simplementa se trasladaría a Estados Unidos y abandonaría el mercado mexicano, como si fuera tan fácil desmontar sus plantas de producción y montarlas de nuevo en otro país, como si fueran tiendas de campaña. En el hipotético (y absurdo caso) de que Nissan decidiera abandonar el mercado mexicano tendría que vender sus plantas aquí, y no hay mucho mercado para ello, seguramente terminaría vendiendo sus activos como chatarra para intentar conseguir algo de dinero, sería un negocio ruinoso. Una planta como las que tiene Nissan cuesta miles de millones de dólares y su salud financiera ahora mismo no está para hacer esos gastos.
Entonces. lo que va a terminar haciendo Nissan será reorganizar su producción con el fin de consolidar sus mercados internos. Eso podria tener el efecto de fortalecer la marca en México y en el extranjero, debilitando la marca en Estados Unidos, así, la estrategia de Drumpf ocasionaría el efecto contrario: fortalecer internacionalmente las marcas que fabriquen en México