Por fin el día de hoy Netflix trae consigo una nueva y esperada serie en conjunto con Marvel, y con ello, un nuevo episodio dentro del MCU y un paso más adelante de "Los Defensores"; con ustedes, el protector de Harlem: "Powerman" a.k.a. Luke Cage.
Esta serie nos ubica en la vida de Luke posterior a conocer a Jessica, viendo cómo trata de no meterse en problemas, pero ellos llegan a él y no tiene otra opción más que actuar, no sólo porque puede, sino porque debe.
En Harlem las cosas no van mejor que en otras partes de Nueva York, ya que el crimen organizado trata de seguir trabajando a pesar de las bajas que han tenido (Fisk), y para un barrio de afroamericanos, mantener el control y la tradición es lo que cuenta.
Un grupo de criminales bajo el mando de "Cottonmouth", un "hombre de negocios" cuyo último plan resultó en un fracaso por la ambición de dos chicos que le robaron mercancía y dinero, por lo cual decide a darles caza y es aquí donde cruza caminos con Luke.
Con tintes tanto de "Daredevil" como "Jessica Jones", la serie mantiene el estilo y la temática como si fuera una sola, aunque no con tanta acción como la primera y menos misterio que la segunda; Luke Cage encuentra su propio lugar, y es uno bien merecido.
