Las máquinas nos lo están poniendo difícil en algo que siempre ha sido dominio nuestro y que nos encanta: ganar en los juegos, ser los campeones. De momento no nos han batido en el StarCraft, pero sí en póker, ajedrez, al Go y ahora alguien ha inventado un robot que nos gana siempre a piedra-papel-tijeras. La revolución robot era esto.
No se trata de que el robot haga trampas como vimos con la pillería que las inteligencias artificiales lograban desarrollar para ganar en los videojuegos, aunque sí juega con cierta ventaja porque el truco está en anticiparse por muy poco a la jugada humana. Es decir, se basa en lo previsible en nuestro juego y en la capacidad de reconocimiento que pueden alcanzar los robots gracias a la tecnología actual, pero mejor verlo en acción.
No es cuestión de táctica, es cuestión de rapidez
La idea no podía venir de otro sitio que no fuese Japón (nunca defraudan), concretamente de la Universidad de Tokio. Explican los autores en la publicación de su trabajo que han desarrollado un robot que gana el 100% de las veces al juego piedra-papel-tijeras, pero eso sí, con un pequeño as en la manga gracias a la tecnología.
¿Cómo puede ganar siempre en una cosa tan aleatoria y sin meterse en nuestras mentes? Porque la predicción es más una consecuencia que una anticipación, ya que la realiza según la forma que toma la mano humana tras la cuenta que se realiza antes de mostrar la piedra, el papel o las tijeras o incluso sin ella, tardando aproximadamente un milisegundo.
Hicieron varias versiones mejorando el tiempo que el robot tarda en mostrar su jugada, de modo que iban recortándolo para al final lograr esa victoria. Empezaron con un retraso de 20 milisegundos con respecto a la respuesta humana y acortaron hasta que el robot mostraba su jugada prácticamente a la vez, incorporando en una tercera versión las tecnologías de rastreo de alta velocidad "1ms Auto Pan-Tilt" y "Lumipen 2", que son las que reconocen a gran velocidad la forma de la mano humana y mejoran la sincronización entre ambos movimirntos, según explican.
Aunque pueda parecer únicamente un experimento gracioso, la idea es que esto al final tenga una aplicación en la robótica de apoyo en la realización de tareas o movimiento, sobre todo pensando en industrias en las que es complicado integrar una automatización por coste o porque por el tipo de tarea o lugar resulta más complejo. Veremos en qué queda todo esto, sobre todo de cara a que sea beneficioso para los seres humanos, pero de momento nos quedamos en que los robots han ganado otro asalto en lo que se refiere a juegos.