Ya lo hemos dicho anteriormente, la delincuencia evoluciona de la mano de la tecnología y el caso de hoy es prueba de ello. La Procuraduría General de Justicia de Ciudad de México detuvo a cuatro personas, tres mujeres y un hombre, relacionados con los delitos de robo a casa-habitación, de vehículo e incluso narcomenudeo, que usaron Tinder para engañar a sus víctimas.
La situación se desenvuelve así: en agosto pasado una de las víctimas, después de entrar en confianza, se citó con una de las imputadas en un restaurante de la colonia Polanco. A dicha cita acudieron las tres mujeres y tras convivir un rato con el agraviado, le propusieron continuar la fiesta en un lugar más privado.
En el camino al domicilio de la víctima, compraron más bebidas alcohólicas y al llegar, tras un rato más de convivencia, el afectado quedó inconsciente. Fue al despertar cuando se llevó la sorpresa de que le faltaban varios objetos de valor y su auto. Entonces, acudió a la Fiscalía Desconcentrada de Investigación de la Delegación Miguel Hidalgo en donde interpuso la denuncia correspondiente.
Tras la intervención de la policía de investigación y la Coordinación General de Servicios Periciales, se logró acceder a videos del lugar en donde la víctima y las agresoras estuvieron. Esto llevó a retratos hablados de estas últimas y posteriormente a encontrar sus cuentas en Instagram y Facebook.
Edmundo Garrido Osorio, Procurador General de Justicia capitalino, relata que se logró rastrear a los victimarios hasta un centro comercial en la delegación Coyoacán, en donde fueron detenidos. Al momento del operativo, además de diversos objetos de los cuales no pudieron demostrar legítima posesión, también fueron asegurados numerosos paquetes de cocaína.
La víctima que inicialmente denunció los hechos, reconoció a las mujeres como las personas con las que estuvo en su departamento. Con todos los cargos que enfrentan, las tres imputadas (de 21, 22 y 24 años), así como el imputado (de 19 años), enfrentan sentencias que podrían alcanzar hasta los 22 años de cárcel.
Hasta el momento, se presume la inocencia de los imputados hasta que la autoridad resuelva lo contrario con las pruebas pertinentes.
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Imágenes | TechCrunch | PC World
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