A unas horas de que el Consejo de Salubridad de el diagnóstico para el país y anuncie nuevas medidas para las próximas semanas, el subsecretario de prevención y promoción de la salud, Hugo López-Gatell, dijo que empresas que no hagan actividades sustanciales y que se nieguen a invitación por parte de las autoridades a cesar sus operaciones, serán clausuradas.
La medida comenzó a tomarse hace algunos días en Nuevo León y hay reportes en Oaxaca y San Luis Potosí, pero ahora se precisó que incluso se podría estar cometiendo un delito al tener un negocio abierto.
En la conferencia, López-Gatell dijo que la industria automotríz y el comercio o distribución de productos no esenciales, como tiendas departamentales, papelerías, venta de calzado, entre otras, son los principales sectores de empresas que se han negado a cerrar.
Detalló que del 3 al 14 de abril se hicieron inspecciones federales y se constató que 50% de empresas cerraron conforme a lo establecido en el decreto de contingencia.
Sin embargo, del total de empresas, a 17% que tenían todavía actividades se les invitó a cerrar, lo cual hicieron. Otro 18% no respondió a las invitaciones.
A las empresas que se nieguen a cerrar, se les levantará un acta de inspección y se da vista a la autoridad sanitaria para que realice el procedimiento de clausura. No solo eso, también se da vista al ministerio público para que se realice investigación sobre posible delito.
Sobre la entrada de la inminente fase 3, López-Gatell dijo que no se "adelantarán vísperas" y que toda información relevante será dada a conocer "en tiempo y forma".
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