Los parpadeos tienen una función muy importante para mejorar nuestra visión y el procesamiento de la información visual. De acuerdo con el artículo publicado en PNAS, los parpadeos son una función que va más allá de solo estar relacionada con el mantenimiento de nuestros ojos.
Esta acción mecánica de nuestro cuerpo tiene implicaciones cognitivas que nunca nos habíamos imaginado, hasta ahora.
Contrario a lo que se creía, el parpadeo hace más que humectar nuestro globo ocular. Realizar un parpadeo provoca una especie de "señal lumínica" que nos ayuda a enfatizar la información que estamos adquiriendo, ya sea leyendo, viendo algo que está sucediendo en la calle o incluso en la televisión.
Según escriben los neurocientíficos encargados del proyecto, en lugar de interrumpir el procesamiento visual, parpadear resalta la información adquirida, de tal modo que funciona como un impulso para interpretar mejor lo que estamos viendo o leyendo.
"Mostramos que el parpadeo aumenta el poder de la estimulación retiniana y que este efecto mejora significativamente la visibilidad a pesar del tiempo perdido en la exposición a la escena externa".
Además, fueron un paso más allá en la investigación. Durante el estudio, pidieron a 12 voluntarios que observaran imágenes con contrastes dinámicos para monitorear los cambios que ocurrían tras indicarles que parpadearan. Encontraron que parpadear de manera "artificial" (es decir, bajo comando) tenía los mismos efectos que el parpadeo natural, provocando que la intensidad de las señales que entran al ojo aumentara.
Anteriormente se creía que los parpadeos simulados no tenían el mismo efecto que los naturales. Ahora parece que, en ciertos contextos, parpadear a propósito puede ser de gran ayuda, no solo para fragmentar la información que estamos recibiendo y que su efecto nos ayude a procesarla, sino también para enfocar mejor nuestro campo de visión.
De acuerdo con información de la Cleveland Clinic, las personas dan en promedio entre 13,440 y 16,320 parpadeos al día. Seguramente un nuevo estudio podría estimar cuántos de esos parpadeos son provocados por razones biológicas y no por motivos de visualización o aprendizaje.
Entre fotones y retinas
Otro estudio, realizado en 2016, encontró también que los parpadeos producen un aumento significativo en la actividad neuronal. Es decir, provocan un pico de energía dentro de nuestro cerebro, haciendo que más neuronas se activen por unos instantes.
Además, podemos afirmar que, para quienes tenemos nuestros ojos sanos, la visión es nuestra principal vía de información. Por eso es mucho más común tener "color absoluto" que oído absoluto. Nuestros ojos son tan sensibles que, según un estudio, somos capaces de percibir fotones en escalas unitarias, es decir, podríamos percibir el brillo de un solo fotón (la partícula de la luz).
Y es que diariamente nuestros ojos reciben cantidades verdaderamente gigantescas de fotones. Un profesor escribió en su portal de Medium que, pese a que la mitad de los fotones que llegan a nuestro ojo son absorbidos por el medio ocular, el flujo de estas partículas que interceptan la retina es de aproximadamente 200,000,000 fotones. Claro que ese valor se debe tomar con pinzas, pues se deben realizar muchas suposiciones para poder realizar un cálculo coherente.
Me pregunto si el parpadeo también podría desempeñar un papel importante en la mejora de la comprensión durante explicaciones auditivas. Sería interesante que futuras investigaciones abordaran este aspecto, ya que podría ofrecer una nueva perspectiva sobre cómo nuestro cuerpo reacciona y se adapta a diferentes formas de procesar información.