Por desgracia, la lepra no ha sido erradicada en México. Debido a un reporte epidemiológico difundido por Secretaría de Salud ha trascendido que han habido 89 casos confirmados hasta el 3 de octubre. Es sin duda un número preocupante, pero no es una enfermedad que recién ha llegado al país.
El mismo reporte epidemiológico detalla que solo en 2019 127 casos de lepra fueron detectados y confirmados.
La prevalencia de lepra es tan antigua en México como el encuentro de los mundos. Aunque la batalla contra la lepra comenzó en el siglo XVI, el primer Programa Nacional para el Control de la Lepra es de 1960. El problema era tan gigantesco que en 1989 hubo más de 16,000 casos, y para 2017 la disminución de 412 casos, concentrándose la gran mayoría en Guerrero, Jalisco, Oaxaca, Sinaloa y Michoacán.
Oficialmente la lepra dejó de ser un problema de salud pública en 1994, cuando México alcanzó la meta de tener menos de un caso por cada 10,000 habitantes.
Cómo vamos en 2020
Con todo y los 89 casos, 2020 todavía podría significar el récord de casos mínimos, considerando que en 2018 fueron localizados 102 casos nuevos y en 2019 127. Los estados en que han sido localizados los casos en 2020 son:
- Aguascalientes, un caso
- Baja California, dos casos
- Coahuila, dos casos
- Colima, tres casos
- Chiapas, cuatro casos
- Guanajuato, dos casos
- Guerrero, tres casos
- Jalisco, seis casos
- Estado de México, un caso
- Michoacán, 15 casos
- Morelos, un caso
- Nayarit, cinco casos
- Nuevo León, cuatro casos
- Oaxaca, un caso
- Quintana Roo, dos casos
- Sinaloa, 32 casos
- Tamaulipas, dos casos
- Yucatán, tres casos
La lepra es curable, siempre y cuando se detecte a tiempo. El tratamiento dura entre seis y 12 meses, y depende principalmente del tipo de lepra que se trate. El tratamiento incluye poliquimioterapia con Dapsona, Rifampicina y Clofazimina.
Ver 4 comentarios