La NASA ha cancelado el segundo intento para lanzar el cohete Space Launch System (SLS) de la misión Artemis, luego de que se registrara una fuga en una tubería de desconexión rápida, que conecta el sistema de tierra al cohete y no pudiera ser solucionada luego de múltiples intentos.
Aunque se esperaba que la agencia lanzara la misión a la 1:17 pm hora del centro de México de este sábado 3 de septiembre, la fuga, detectada aproximadamente siete horas antes del despegue, terminó por frustrar el intento.
En múltiples ocasiones los equipos a cargo del cohete intentaron detener la fuga durante el proceso de cuenta regresiva, primero calentando el conector del tanque y luego enfriándolo con combustible para detener la fuga. Después, se procedió a represurizarlo con helio, pasando después a otra ronda de calentamiento y enfriamiento, fracasando en todos los intentos.
Las posibles (e improbables) nuevas fechas para realizar el despegue
De momento la agencia tiene como fechas tentativas un nuevo intento de lanzamiento para el domingo 4 de septiembre (poco probable dada la fuga en el sistema) y una adicional para el lunes 5 de septiembre, pero antes se debe revisar la posibilidad de arreglar este nuevo problema. En caso de que se decida lanzar en esta segunda fecha, se tendrá una ventana de 90 minutos que comenzará a las 4:12 pm, hora del centro de México.
Por otro lado, si se atrasa un día más, para el martes 6 de septiembre, la ventana de lanzamiento es de solamente 24 minutos y ocurriría a las 5:57 pm.
Si el cohete no se lanza en este periodo, es posible que la siguiente ventana se abra hasta octubre, puesto que el Sistema de Terminación de Vuelo, que impide que el cohete se convierta en un peligro si se sale de control, tiene que pasar un proceso de revisión relativamente seguido, mismo que no se puede realizar en la plataforma de lanzamiento donde se encuentra.
Por esto, si no despega en los próximos días y los ingenieros a cargo determinan que no es viable, el SLS deberá regresar al Edificio de Ensamblaje de Vehículos de la NASA para realizar las pruebas, y atrasando en consecuencia, su nueva fecha de despegue a, por lo menos, mediados de octubre.