InDrive no quiere a los taxistas como enemigos y revivió una antigua estrategia de Uber en Playa del Carmen: hacerlos sus socios

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El enérgico rechazo de los taxistas a las aplicaciones de transporte en Quintana Roo ha sido un tema muy complejo desde hace años. Pero hay una que parece estar esquivando los problemas y se cuela lentamente en el mercado local: hablamos de InDrive.

Mientras Uber está envuelto en protestas y conflictos legales con el sindicato de estos transportistas, InDrive anunció un acuerdo con el gremio que le permitirá ampliar su operación en el estado.

InDrive está tratando de abrirse paso en Quintana Roo. No se trata de cualquier mercado, el estado es un campo minado para las aplicaciones de transporte.

Desde la llegada de Uber en 2016, los taxistas han peleado legalmente, e incluso violentado a conductores y pasajeros de apps para, según argumentan, defender su fuente de trabajo.

Pero esquivando los golpes, InDrive, que ya operaba en Cancún desde marzo, anunció en un comunicado que su servicio se ha ampliado también a Playa del Carmen desde la semana pasada.

La promesa es que usuarios y conductores podrán desplazarse de forma segura gracias a un acuerdo alcanzado con el sindicato local de taxistas “Lázaro Cárdenas del Río”.

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La aplicación tiene una segunda promesa para los usuarios: precios justos. Esto se vuelve crucial, ya que tomar un taxi entre Playa del Carmen, Cancún, Tulum y otros paradisiacos puntos de interés es casi imposible por menos de mil pesos.

Kevin Lamas, representante Sr de Negocios de InDrive en México, aseguró a Forbes, que en estos meses, el volumen de viajes realizados a través de su aplicación ha aumentado 200%.

Mismo juego, ¿nuevas reglas?

En el comunicado, InDrive no dio detalles de los acuerdos alcanzados con la organización sindical. Solo expresó que “este es un hito que demuestra que garantizar que todas las voces sean escuchadas y respetadas resulta clave para asegurar el éxito”.

De su lado, el director del Instituto de Movilidad de Quintana Roo, Rodrigo Alcázar, expresó que la aplicación será “bien recibida en Playa del Carmen” y que ”este logro demuestra que las normativas locales de la industria son exhaustivas pero alcanzables.”

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La estrategia de acercamiento a sindicatos no es nueva. En sus años de lucha por el mercado, Uber ya ha intentado alcanzar acuerdos con el sindicato de taxistas.

Por ejemplo, a finales de 2023, Uber y el Sindicato de Taxistas Andrés Quintana Roo acordaron aparecer en la app como una opción más de transporte, bajo la categoría de "taxi convencional". Ha resultado un claro fracaso y los problemas continúan.

Pedir perdón o pedir permiso

Tal vez la diferencia esté en que Uber comenzó a operar sin ninguna concesión en Quitana Roo, como en la mayoría de las ciudades - y sigue peleando mantenerse así -. Se encontró con la creación de una Ley de Movilidad que prácticamente impidió su operación en el estado en 2018.

Los problemas legales no han parado desde entonces. A mediados de agosto, Uber informó que había obtenido un amparo para operar en cualquier aeropuerto del país, incluido Cancún, “sin la necesidad de la obtención de un permiso”, según reportó El Economista.

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Voceros del Movimiento de Transportistas Organizados Unidos de la Riviera (TOUR), aseguraron que la información es falsa, “pues no hay evidencia del amparo que supuestamente beneficia a la plataforma”, de acuerdo con el diario.

Los taxistas no van a bajar los brazos. Este fin de semana unos 700 conductores realizaron una marcha en rechazo al supuesto amparo, que avanzó de Cancún hasta Tulum, según informó la agencia Quadratín en Quintana Roo.

Se espera que los taxistas realicen una protesta estatal el 31 de agosto. De acuerdo con Quadratín, la movilización contempla bloqueos en la zona hotelera, el aeropuerto de Cancún, Puerto Morelos y sí, también en Playa del Carmen. Toma tus precauciones si tienes algún viaje planeado en esa fecha.

Residentes y turistas del estado podríamos declararnos fans de la relación, aparentemente pacífica, que están iniciando InDrive y los taxistas en Quintana Roo. Pero con la experiencia que ha dejado Uber, solo podemos poner ojos llorosos de gatito y decirles: duren.

Imagen | InDrive

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