Por razones que a veces son difíciles de explicar, en muchas ocasiones nos aferramos a ciertos objetos. Ya sean unos zapatos, un juguete muy querido de nuestra infancia o, más recientemente, a nuestros gadgets favoritos a pesar de que ya tengan algunos años de antigüedad.
Si bien en muchos casos conservamos las cosas por un lazo emocional, también es cierto que muchos productos de consumo tienen un ciclo de vida bastante largo, como las lavadoras o hasta las computadoras. Sin embargo, los celulares son piezas tecnológicas que hay que renovar constantemente, así que si no quieres quedarte atrás en la cadena de evolución móvil, es importante que tomes en cuenta algunos factores clave para renovarte a tiempo y no morir de vergüenza a causa de alguna falla técnica en un momento clave del día.
Mejoras en la batería
Sabemos que uno de los aspectos más importantes de un celular es la batería, pues es ésta la que le da autonomía a nuestros teléfonos. Tener una batería adecuada y funcional nos facilita la vida en muchas maneras, pues no tenemos que estar atados a un enchufe, además de que evitamos quedarnos incomunicados en momentos importantes o emergencias.
En los primeros años de la llegada de los grandes smartphones, por ahí del 2011 cuando el Galaxy S2 de Samsung apareció y Apple introdujo por primera vez al mercado su asistente por voz Siri en el iPhone 4S, los celulares ya comenzaban a ser todo un fenómeno y a incorporar innovadoras funciones. A pesar de todo eso, la batería de los móviles no era suficientemente eficiente.
En ese entonces las baterías rondaban los 1,432mAh, para el iPhone, y los 1,650mAh para el Galaxy S2. Hoy las buenas baterías en Android no tienen menos de 2500mAh; de hecho, son las baterías de 3000mAh las que se ubican como el estándar promedio para los celulares de gama alta. Esto sin mencionar los casos excepcionales como el Nexus 6P de Google, con sus 3,450mAh.
Por su lado, la plataforma de Apple ha logrado optimizar de forma extraordinaria el consumo de energía, pues con una batería aparentemente modesta de 1,715mAh finalmente ha logrado igualar la duración de pila de los celulares de gama alta de Android.
Aunque en los números parecen semejantes, el cambio de batería de 1,560mAh, del iPhone 5s, a los 1,715mAh, del iPhone 6, hizo una diferencia abismal en rendimiento, un ajuste que hace que valga la pena renovar un modelo por el otro, aún cuando todos los demás elementos fueran casi los mismos (aunque no lo son).
Memoria RAM y procesador
Un aspecto que quizás no sea muy importante para muchos usuarios es el procesador, aunque hay que decir que éste es el componente que le da vida, o más bien, inteligencia, al teléfono.
Y es que aunque es verdad que con cada nuevo modelo los procesadores son mejores —es decir, más rápidos, capaces de realizar muchas tareas al mismo tiempo y consumir la menor cantidad de recursos— un teléfono más rápido no siempre debe ser prioridad al momento de decidir cambiar de teléfono.
Esto claro, a menos que te des cuenta de que tus exigencias son cada vez mayores y de que tu celular funciona excesivamente lento, se traba, reinicia, apaga sin razón aparente, o se calienta demasiado. En ese caso es momento de buscar un nuevo teléfono con un mucho mejor procesador.
En cuanto a memoria RAM, si aún eres de lo que tiene un celular con menos de 1GB en RAM, es momento de cambiar de teléfono. Esa puede ser una de las razones por las que tu móvil cierra repentinamente las aplicaciones o tarda mucho en responder a tus comandos; no tiene suficiente capacidad para ejecutar varias tareas simultáneas.
Mejoras en la cámara
Hoy en día, la cámara es para muchos usuarios, probablemente la característica más importante de un teléfono. Dependemos demasiado de ella para inmortalizar nuestros momentos más preciados, además de que es posiblemente una de las funciones que más usamos.
Al igual que la batería, las cámaras son un aspecto de los celulares que tardó un poco en evolucionar y en ofrecer los extraordinarios resultados que hoy podemos disfrutar. Por esa razón muchas personas piensan que es innecesario tener una cámara digital que no sea más profesional.
Hoy los teléfonos de Sony, Samsung, HTC, LG, Huawei y Apple son los que mejores cámaras ofrecen, con sensores de 12, 16 y hasta 20 MP, por mencionar algunos. Así que si la cámara de tu celular no te satisface, las fotos siempre te salen pixeleadas, movidas, oscuras o desenfocadas, es momento de renovar tu móvil con una cámara que sí satisfaga tus necesidades. Las opciones son muchas y hay para todos los presupuestos.
Mejoras de almacenamiento
Un detalle importante a tomar en cuenta para decidir si cambias de teléfono o no, es la capacidad de almacenamiento, pues de nada sirve tener una plataforma rica en contenidos y aplicaciones, o una buena cámara, si no tienes espacio suficiente para descargar todas las apps que quieras y de tomar fotos y videos sin tener que estar borrando imágenes cada vez que quieras capturar un nuevo momento.
Simple y sencillamente, para poderle sacar el máximo provecho a cualquier smartphone actualmente es necesario tener mucho espacio de almacenamiento. Aunque a muchas personas les siguen funcionando los 16GB del iPhone, para otras, ese almacenamiento no es suficiente. Para quienes llenan sus móviles de música y fotos, probablemente una memoria de 64GB pueda sí alcanzar.
En el caso de los dispositivos Android, una ventaja pueden ser las tarjetas microSD para expandir el almacenamiento, importante opción que hace que valga la pena cambiar un Galaxy S6, por un Galaxy S7, por mencionar un ejemplo. En cualquier caso, procura que tu almacenamiento de fábrica sea de al menos 32GB. Si es de 16GB, un teléfono con entrada para tarjetas microSD es obligatorio, pues será ahí donde tendrás que guardar tus contenidos y apps.
Sistema operativo y actualizaciones
Para bien o para mal, el sistema operativo de los celulares es otro de los aspectos indispensables para el buen funcionamiento de nuestros teléfonos. Con cada nueva versión llegan nuevas y emocionantes funciones, pero también mejoras en el rendimiento de nuestro smartphone y mayor seguridad, además de que se resuelven posibles errores o bugs.
Dado que en el caso de Android a veces las actualizaciones de sistema operativo son demasiado lentas, es importante que cuando compremos un celular nuevo nos aseguremos de que éste ya cuente con la versión más nueva de Android disponible. Y en caso de no ser así, procura que el fabricante tenga contemplada al menos una actualización.
En el caso de iPhone esto es más fácil, ya que las actualizaciones de iOS llegan inmediatamente para quienes cuentan con suficiente espacio de almacenamiento disponible para poder descargarlas.
Un mejor plan y más beneficios
Finalmente, un último aspecto que es vital a la hora de renovarte y cambiar de celular son los nuevos planes que constantemente se actualizan y traen cada vez más beneficios para los usuarios.
La ventaja de renovar tu plan es que ahora tendrías minutos y sms ilimitados para llamar y mensajear, además de más megas para navegar por Internet. Lo mejor es que no sólo se limita a México, pues ya también opera para Estados Unidos y Canadá. Un ejemplo reciente son los planes Max Sin Límite de Telcel, que además ofrecen redes sociales como Facebook, Facebook Messenger y Twitter sin restricciones en México.
Pero no solo eso, las ventajas de tener un plan con Telcel es que tienes acceso a los mejores y más novedosos smartphones del mercado, algunos de ellos sin costo inicial. Por otro lado, la red de Telcel es la de mejor cobertura en todo México y su red 4G LTE es la más avanzada y rápida (además de que continúa expandiéndose exponencialmente cada año), ideal para sacarle más provecho a todas las funciones y posibilidades de tu smartphone.
En suma, estos son los aspectos más relevantes a tomar en cuenta a la hora de cambiar de celular. Si bien es verdad que cada año llegan al mercado nuevos modelos, los operadores como Telcel tienen muy bien medido el ciclo de vida de estos aparatos, por lo que resulta muy conveniente tomar todos los beneficios que traen consigo los planes a 24 meses, aunque hay dispositivos que con el cuidado adecuado podrían mantenerse funcionales por más tiempo.
Para aquellos que quieran tener lo último en tecnología dos años es el tiempo perfecto para cambiar de celular y disfrutar de las funciones y características más novedosas del mercado.
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