SpaceX necesita aumentar la producción de su motor Raptor de próxima generación o podría enfrentarse a consecuencias indeseadas. Según reportes de CNBC y Space Explored, Elon Musk, CEO de la compañía, describe a la fabricación del motor como una "crisis" mucho peor de lo que parecía hace unas semanas en una carta enviada sus trabajadores.
En su mensaje además informa que estaba renunciando a unas vacaciones de Acción de Gracias planificadas para trabajar en la línea de producción y pedía a los empleados de la compañía a que contribuyeran si tenían la oportunidad.
Los Raptors son los motores con los que SpaceX impulsará Starship, su vehículo totalmente reutilizable desarrollado para llevar personas y carga a la Luna, Marte y otros destinos, para lo que necesitará muchas de estas unidades. Cada nave espacial necesitará 33 motores para la primera etapa Super Heavy y seis para la etapa superior, llamada simplemente Starship.
Para complicar las cosas, Musk necesita fabricar en un futuro cercano la que será la próxima flotilla de Starships no solo para los viajes espaciales, sino también para lanzar la versión 2 de sus satélites de internet Starlink. Actualmente más de 1,600 naves se han colocado en órbita y 100 de la versión 1.5 usando los cohetes Falcon 9, sin embargo para los V2 se requiere un mayor espacio para la carga, al ser estos aparatos todavía más grandes, que serán una fuente de ingresos vital para la empresa.
"El Starlink V1 por si solo es financieramente débil, mientras que V2 es fuerte", señala el correo de acuerdo con Space Explored. "Estamos aumentando la producción a varios miles de unidades por año, lo que consumirá un capital masivo asumiendo que el satélite estará en órbita para manejar la demanda de ancho de banda, si no, los terminales serán inútiles".
Una complicación que puede llevar a la quiebra
Según el mensaje interno SpaceX necesita solucionar pronto el problema de los motores Raptor y si no logran una tasa de vuelo de la Starship de al menos una vez cada dos semanas el próximo año se enfrentarán a un riesgo real de quiebra.
Ya que la nave está diseñada para ser reutilizable, la compañía no debería tener muchos problemas para volar dos veces al mes, pero de momento solamente cuentan con un vehículo que se encuentra actualmente en fase de vuelo de prueba.
Sin embargo el panorama podría cambiar pronto, puesto que SpaceX se está preparando para lanzar el primer vuelo de prueba orbital, que involucrará el prototipo SN20 y el Super Heavy de nombre Booster 4, misión que podría ocurrir en enero o febrero del próximo año, una vez que la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos termine su revisión ambiental del sitio de lanzamiento.