Lento el avance para recolectar TV’s analógicas en México

El apagón analógico llegó y muchos celebramos la llegada de la Televisión Digital Terrestre a México, pero apenas un par de meses después de su implementación a los usuarios y al gobierno federal parece poco importarles el desechar y recolectar las TV’s antiguas.

En Querétaro, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, ha mostrado un resumen de lo que ha ocurrido en esa entidad al respecto de la recolección y reciclaje de los televisores analógicos, datos que fácilmente podrían mostrar el panorama de lo que ocurren en todo México.

El año pasado, cuando faltaban menos de seis meses para la entrada en vigor de la televisión digital, se le notificó a la Secretaria de Comunicaciones y Transportes y al Instituto Federal de Telecomunicaciones que debían crear un plan para garantizar la recolección y reciclaje de los equipos que se terminarían desechando.

Este plan llegó muy tarde, y aunque la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales ha dispuesto diversos puntos de recolección en todo el país, solo en el Estado de Querétaro de los 20 centros de acopio que existen, hasta la fecha solo han recolectado 1,302 televisores.

A nivel nacional se estima que se terminarán recolectando 40 millones de televisores analógicos, pero Óscar Moreno Alanís, delegado de la secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de la entidad ha comentado que no existe una estadística o meta de la cual partir para determinar si el programa tendrá o no éxito, ya que el realizarlo es opcional para los ciudadanos.

No se puede hablar de que si vamos bien o mal en un porcentaje de acopio de televisores. Lo que sí te puedo decir es que ha habido muy buena respuesta porque todos los días llegan televisores

Sin embargo, hay que aclarar que en caso de que estos dispositivos sean desechados de manera incorrecta, podrían suponer un riesgo para la población. Por lo que las familias que decidan dejar de utilizar este dispositivo en sus hogares será recomendable que lo desechen en los centros de acopio autorizados.

Vía | El Financiero