La propuesta de gasto del país para 2021 no solo contempla un aumento (aunque marginal) a ciencia y tecnología, así como la posibilidad de vetar a aplicaciones que no paguen su IVA en México, también prevé aumentar los precios de bandas del espectro radioeléctrico, vital para ofrecer servicios de telefonía móvil en el país.
El IFT por fin puso la vista en el tema, y mandó un documento al Congreso y a la Secretaría de Hacienda advirtiendo que, de aumentar los costos del espectro, se esperarían aumentos en los planes de telefonía móvil, e incluso se pondría en riesgo la llegada del 5G, pues es posible que inversores se alejen del país.
Bandas para 5G, las más perjudicadas
En concreto, la propuesta de gobierno federal es incrementar en 48% el costo de los derechos para acceder a dos bandas móviles, la de 800 y la de 850 MHz. Contemplando inflación dejó sin cambios las bandas AWS, PCS y 2.5 GHz, pero está proponiendo aumentos de hasta el 186% en comparación con las propuestas del IFT, en los costos de derechos para tres bandas que hoy no son tasadas pero funcionarán para 5G: la banda L, la banda de 600 MHz y la de 3.3 a 3.6 GHz.
El documento que envió el Instituto Federal de Telecomunicaciones es un análisis con los impactos negativos que derivan de cobrar altos costos por el espectro radioeléctrico. Entre ellos se incluye, además del aumento de precios al consumidor final, sino también impedir que lleguen nuevos competidores al sector, reduciendo el entorno favorable para la libre competencia.
Además de menos competidores, el peor escenario es que los operadores que ya funcionan, se vean obligados a devolver parte de su espectro, exactamente lo mismo que ocurrió con Telefónica que está en proceso de migrar su servicio por completo a la red de AT&T. Con el movimiento, Telefónica devolverá espectro y tendrá ahorros porque ya no pagará los derechos anuales.
El IFT aclara que envió en junio pasado dos propuestas de modificación a la Ley Federal de Derechos para ajustar a la baja los costos anuales del espectro radioeléctrico. Tres meses después, como parte del paquete económico del 2021, llegó la propuesta de gobierno federal que incluye las alzas mencionadas a ciertas bandas.
"Lejos de representar un beneficio social, la propuesta de la SHCP tendría impactos negativos para la conectividad de la población, desincentivaría las inversiones y la participación en futuros procesos licitatorios, incrementaría la posición asimétrica del AEPT, limitaría las posibilidades de que se ofrezcan en México servicios de última generación (5G) y, además, no garantizaría que el Estado recibirá mayores ingresos por concepto de derechos derivado de la falta de interés en nuevas licitaciones de espectro y del posible regreso de mayores cantidades de espectro por parte de los actuales operadores".
Instituto Federal de Telecomunicaciones
Piso cada vez más disparejo
Entre más grande es un operador, menor es el impacto por el pago del espectro radioeléctrico. The CIU estima que en 2019 Telcel dedicó el 3.1% de sus ingresos a derechos por uso de espectro; AT&T dedicó el 11.5% de sus ingresos y Movistar el 14.7% de los propios. Con corte a agosto de 2020, Telcel tiene un 43.1% de los 700 MHz asignados, AT&T un 35.2%, Altán un 13.4% y Telefónica un 8.3%.
Los datos son concluyentes: a ganancia del preponderante, los otros operadores tienen que dedicar más de sus propias ganancias para el pago del espectro, de forma que un alza de precios terminaría por desemparejar, aún más, el piso entre competidores.
Con Telcel ganando territorio, el panorama se complicó para el resto. The CIU retoma que Movistar pasó de pagar 3,300 millones de pesos en 2019 a 2,500 millones en 2020, y la cifra seguirá en decremento conforme se concrete la devolución de toda su frecuencia.
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