Si China o Rusia cortan alguno de los cables submarinos, el internet caería: la OTAN tiene un plan para evitarlo

Con el internet no, por favor. En medio de duras guerras y conflictos diplomáticos en todo el planeta, la OTAN decidió tomar precauciones para asegurar la conectividad civil y militar en caso de que alguien se ponga creativo y quiera intentar un sabotaje a los cables submarinos que corren por aguas europeas y que permiten el funcionamiento de la red.

Y ahora van del mar al espacio exterior. De acuerdo con un artículo de Bloomberg, se esta desarrollando un proyecto que permitirá redirigir las comunicaciones de los cables submarinos de fibra óptica, hacia sistemas de satélites. En el desarrollo del proyecto participan especialistas de Estados Unidos, Islandia y Suecia.

El reporte afirma que la iniciativa no se ha hecho pública y que la motivación son los temores de las potencias occidentales, de que países como Rusia o China intenten dañar el cableado submarino, fundamental para que podamos comunicarnos, trabajar y, por supuesto, ver nuestras series y memes de gatitos.

Los temores no solo salen de la imaginación de los gobernantes. En 2023 la OTAN estableció un centro para coordinar mejores prácticas para la protección de la infraestructura submarina de internet, luego de que una explosión destruyera el oleoducto ruso Nord Stream 2, en el conflicto armado entre Rusia y Ucrania.

El Programa por la Paz y Seguridad de la OTAN ha otorgado un presupuesto de 2.5 millones de dólares, además de donaciones en especie de centros de investigación, según documentos a los que Bloomberg tuvo acceso.

Se calcula que el proceso de prueba de prototipos tardará dos años, para luego crear un sistema de operaciones que invitará a participar a gobiernos y socios comerciales.

Otro temor son los desastres naturales, como los huracanes y terremotos, que cada vez se vuelven más violentos e impredecibles en nuestro pobre planeta, a causa del cambio climático.

Actualmente hay más de un millón de cables submarinos de fibra óptica en servicio alrededor del mundo. Se encuentran revestidos por capas de aislamiento y protección adicional, mientras que los que se encuentran cerca de las costas utilizan blindaje adicional para salvaguardarlos.

Estas redes cuentan con distintos alcances y algunos son tan largos como el que va de Estados Unidos hasta Singapur, Tailandia y Vietnam, operado por América Gateway, con una distancia de 20 mil kilómetros.