Durante los últimos años, la tecnología ha experimentado una serie de cambios que la han hecho colarse en nuestros ámbitos más cotidianos, alumbrando por el camino celulares cada vez más inteligentes, wearables y toda clase de dispositivos que hacen nuestra vida más fácil.
Sin embargo, uno de los más importantes ha tenido que ver con las conexiones, es decir, con la aparición de unos modelos tremendamente rápidos y capaces de explotar todas las posibilidades de estos gadgets y aplicaciones. Es el caso del 4G LTE, que actualmente cuenta con millones de usuarios en todo el mundo y de la cual Telcel ofrece la mayor red de cobertura en México; pero analicemos las cifras con mayor profundidad.
Las cifras del 4G LTE
De esta manera y según los datos de GSA, estas redes están creciendo más rápido que cualquier otro tipo de comunicación móvil hasta alcanzar los mil millones de suscriptores. Su análisis estima que son 442 operadores, en 147 estados distintos, los que apuestan por ellas.
Una información que corrobora Ovum, cuyo jefe de investigación, Mark Newman, recalca que “llegar a mil millones de usuarios LTE ha costado menos de seis años, un número que, en comparación con los 10 años que necesitó el 3G, pone de manifiesto hasta qué punto se han vuelto importantes y que obliga a los operadores a renovarse agresivamente para satisfacer la demanda de los consumidores” —de hecho, en marzo del año pasado, la velocidad de crecimiento de los clientes de 4G ya superó la del 3G.
Los expertos, sin embargo, también apuntan a que la variedad de localizaciones, con sus consiguientes regulaciones y legislaciones, podrían llegar a frenar su expansión en determinados territorios, algo en lo que se trabaja con el fin de crear mercados únicos digitales que reduzcan las barreras a la innovación.
El último informe The estate of LTE de Open Signal, por otra parte, nos muestra que Corea del Sur es el número uno en esta clase de conexiones, con una cobertura de LTE del 99,6%. Respecto a México, con la red 4G LTE de Telcel como ejemplo, se encuentra en la media de otros países con un 65%. En definitiva y dicho lo cual, resulta evidente que un amplio espectro de personas (demasiado grande como para que estén equivocadas) se decantan por esta tecnología.
Sus virtudes, por otra parte, también han contribuido a su adopción y han dado lugar a un cambio de tendencia. De hecho, por primera vez y sorprendentemente, los datos del ITU Telecom World apuntan que, en términos globales, las suscripciones de banda ancha móvil en todo el mundo han superado el número de hogares conectados a Internet.
Un cambio necesario
Los datos, sin embargo, no nos sorprenden. De hecho y teniendo en cuenta nuestro actual ritmo de vida, el uso que hacemos de nuestros dispositivos y otras tantas facetas conectadas; la adopción de esta clase de redes resulta imprescindible. Por ejemplo, escuchar música en streaming a través de herramientas como Spotify se ha convertido en un habitual que ha desplazado a la compra de álbumes e incluso a las descargas. De hecho, la utilidad ha conseguido hacerse con 15 millones de usuarios premium este mismo enero.
Evidentemente esta no es la única, sino que no pocas start ups se encuentran trabajando en proyectos musicales parecidos, como Humm, una app española que incluso se desprende de los anuncios pero que todavía está aterrizando. No se quedan atrás las que tienen que ver con contenido audiovisual. Así, YouTube cuenta con mil millones de usuarios mensuales, y ya somos también muchos los que nos decantamos por aplicaciones on demand como Netflix, muy cómodas a la hora de encontrar películas y series por un coste asequible.
En la lista de cambios que han modificado nuestra cotidianidad también se cuelan las redes sociales. Los últimos informes indican, entre otros, que dedicamos al menos 4 horas y media semanales a Facebook, 3 en Twitter e Instagram en cada una, una cantidad de tiempo nada desdeñable que evidencia nuestros hábitos y para los que será básico contar con una buena conexión que nos permita cargar las fotos y vídeos de las diferentes plataformas, interactuar correctamente y demás. La lectura (ahora a través del móvil), la búsqueda de recetas y similares, son otras de las alteradas.
No podemos olvidarnos, tampoco, de su importancia en un contexto en el que los procesos de fabricación e incluso nuestras propias casas son cada vez más inteligentes. Sí, porque en el mundo del todo conectado, del llamado Internet de las Cosas, una buena velocidad de red es imprescindible para garantizar el correcto funcionamiento de todos los implicados. Las 4G LTE, asimismo, nos brindan la oportunidad de descargar aplicaciones al momento, usar el GPS con todas las garantías y un largo etcétera que ya debes imaginarte y que forma parte de nuestra vida diaria. Si esta ha cambiado ¿cómo no iba a hacerlo nuestra conexión?
Nuestras opciones
Volviendo a nuestro país y con la finalidad de pasarse a esta velocidad de descarga, una de las compañías clave es Telcel que, además de disponer de la mayor cobertura en nuestro territorio, cuenta con una serie de planes de renta que lo hacen posible y que se adaptan a tus necesidades. Es el caso, por ejemplo, del plan Telcel Max 4.000, cuya oferta de datos, redes sociales incluidas y minutos, lo convierten en una tarifa adecuada para un amplio abanico de usuarios. Habla y descarga todo lo que requieras por el módico precio de 499 pesos mensuales.
La entidad también pone a nuestra disposición aplicaciones específicas que nos permiten sacarle todo el partido como Claro Música —una herramienta que permite escuchar y descargar miles de canciones sin límites— y Claro Video —muy similar, pero con un amplio catálogo de series, conciertos, documentales, novelas y películas a tu disposición.
Asimismo, cuenta con otras capaces de medir, precisamente, el consumo de Internet, así como con herramientas de almacenamiento en la nube como Clarosync, de mensajería —Versy—, para pagar sin necesidad de usar el efectivo —Transfer— y similares, cada una de las cuales se ve beneficiada por el uso del 4G LTE.
