La semana pasada te recomendamos una de las películas que tienes que ver antes de morir, "El club de la pelea", con mucho suspenso y sobre todo un gran cambio en el clímax que te hará pausarlo para entenderlo.
En esta ocasión volvemos con excelentes actores y sobre todo una historia con un giro que puedes percibir pero no creer por completo, se trata de una policíaca y en la que Denzel Washington ganó el Óscar a mejor actor.
Tenemos a Alonzo Harris (Denzel Washington), un detective condecorado que sabe lo que se necesita hacer para llegar a la fuente, o eso es lo que le quiere mostrar a Jake Hoyt (Ethan Hawke) en su primer día en el departamento de narcóticos.
La película se desarrolla en un solo día en Los Ángeles, en donde Alonzo muestra su lado obscuro a Hoyt, comienza a "enseñarle" cómo hacer las cosas aún y cuando tengas que romper un poco las reglas, Hoyt desesperado por entrar a la división le sigue los pasos.
Su peor error, las cosas comienzan a volverse más turbias y en el clímax tiene un cambio que te hará odiar y amar a otros. Cabe aclarar que el director, Antoine Fuqua, quiso hacer que la misma fuera lo más verídica posible, así que realizó grabaciones en los barrios más peligrosos de Los Ángeles.
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