En noviembre de 2023, la junta directiva de OpenAI despidió de forma repentina a Sam Altman, cofundador y director ejecutivo de la compañía, quien había supervisado los distintos lanzamientos de la empresa, como ChatGPT. Una mezcla de situaciones hizo que los directivos dejaran de confiar en él, hasta que eventualmente regresó para retomar las riendas.
Ahora, una de las exdirectivas de la empresa, Helen Toner, ha decidido dar más información sobre las circunstancias del despido y retorno de Altman en el podcast The TED AI Show.
De acuerdo con Toner, la junta llegó a la conclusión de que debían tener un nuevo director ejecutivo, sin el consentimiento de Altman, ya que estaba claro para ellos que él podría hacer "todo lo posible" para disolver la junta en caso de que esta quisiera actuar en su contra, evitando incluso su propio despido.
Las actitudes y formas de Altman
Específicamente, la exdirectiva plantea que una de las razones por las que la junta dejó de confiar en Altman fue que no reveló que era el dueño del OpenAI Startup Fund, una iniciativa creada en 2021 con el objetivo de fomentar la innovación en sectores donde la IA puede tener un impacto significativo, como atención sanitaria, educación y energía.
Otros motivos fueron que proporcionó información inexacta sobre los procesos de seguridad de la empresa en varias ocasiones e incluso atacó personalmente a Toner después de que ella publicara un artículo de investigación que lo molestó, al punto de mentir a otros miembros de la junta para intentar retirarla.
Además, dos ejecutivos también compartieron sus experiencias con Altman, indicando que la atmósfera de trabajo era "tóxica" en OpenAI, acusándolo de "abuso psicológico". Mostraron evidencia de que había mentido y manipulado, lo que fue suficiente para que finalmente fuera removido.
Entre los ejemplos de la falta de información con la junta, Toner cita el caso de ChatGPT, un proyecto del cual la junta directiva no tenía una supervisión en tiempo real. Cuando se lanzó el chatbot en 2022, no se informó con antelación y la junta directiva conoció de la IA a través de Twitter.
Altman fuera de OpenAI
Toner no habla sobre el proceso vivido durante los días posteriores al despido de Altman, que terminó con los empleados presionando para su vuelta y el apoyo de Microsoft, el principal inversor de la compañía, para su regreso.
Lo que sí menciona la exdirectiva son algunas de las razones, a su consideración, para que Altman volviera, como que a los empleados solo les presentaron la opción de que Altman regresara o ver perder la compañía, además del miedo que le tenían al cocreador de la empresa y de las posibles represalias que podía tomar.
Según Toner, el propio historial de Altman antes de OpenAI ha sido similar, siendo despedido de otras empresas que ha fundado o en las que ha trabajado, en medio de argumentos de ser engañoso o de tener un comportamiento caótico.
Una corta historia fuera de la empresa
El caos en OpenAI tras la despedida de Sam Altman terminó en apenas cinco días, con él siendo restituido como CEO y, en el camino, modificando la junta directiva, principalmente a aquellas personas que se opusieron a él.
Durante el breve periodo en que estuvo fuera de la compañía, sucedieron una gran cantidad de eventos, primero con renuncias de otras figuras cercanas a Altman, la oferta hecha por Microsoft y la amenaza de los trabajadores de OpenAI de irse a esta compañía, además de una multitud de demandas por la pérdida de inversiones en la empresa.
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