Héctor Álvarez Santiago, delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia en Hidalgo (INAH) mencionó que pretenden reemplazar dos atlantes que se exhiben en la pirámide B de la zona arqueológica de Tula. Señaló que podrían utilizar dos réplicas con el fin de preservarlos.
Los motivos principales son por las precipitaciones de lluvia ácida en Tula, afectando directamente los monumentos. Inclusive menciona que, por la antigüedad de las piezas, actualmente pueden ser afectadas hasta por el mismo viento.
No sería la primera vez
En el caso de la lluvia ácida, indicó que existen componentes químicos que degradan el material pétreo de las esculturas colosales, afectando en el relieve y los colores de estas. Por el momento solo es una propuesta, en el caso de que sea avalada, no se reveló el lugar en el que se colocarían los atlantes.
Es importante mencionar que no se trata de algo nuevo, de las cuatro figuras que existen sobre la pirámide B, solo dos atlantes son originales.
Los atlantes tienen una altura promedio de 4.6 metros y se encuentran formadas por cuatro bloques, el primero corresponde a pies y piernas, el segundo y tercero son el tronco, mientras la última parte es la cabeza. Las cuatro piezas son representaciones de guerreros toltecas.
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