Pedego, la marca con bicis eléctricas de hasta 100 kilómetros de autonomía, llega a México

Andar en bici. Esa actividad que tanto placer te daba de niño, y todavía de adulto, cuando rebasas a los cientos de coches atascados a las 8 de la mañana en Reforma.

Poco a poco, no solo Ciudad de México, sino otras urbes en el país encuentran en la bicicleta una alternativa viable, económica y amigable con el ambiente, para contrarrestar el pesado tráfico y sus efectos.

Con una oferta de servicios relacionados con bicicletas en aumento, y el cúmulo de esfuerzos por hacer crecer la infraestructura para que corran y recorran las ciudades con una mejor movilidad, ahora, un grande a nivel internacional ha puesto su ojo en México para unirse a estos esfuerzos.

Pedego fue fundada hace diez años, en 2008. Su centro de operaciones está en Estados Unidos y se trata de una de las marcas líder en fabricación de e-bikes con más de 100 tiendas abiertas. Para darnos una idea de su escala, de acuerdo a su CEO, Don DiCostanzo, sus ventas han aumentado en un 40 por ciento en 2017 y la meta para el 2018 es de un 50 por ciento, lo que les convierte en una de las empresas con mayor crecimiento en la categoría.

Ahora, Pedego llega oficialmente a México, a través de una sucursal en Polanco, en donde a cargo está Juan Pablo Michelsen.

Las baterías son la clave

Platicamos con Juan Pablo en el lanzamiento de la tienda; él nos explica que las bicicletas cuentan, dependiendo el modelo, con pantallas LCD para indicar la velocidad en la que está el motor, un acelerador, tal y como el de una motocicleta, y un peso aproximado de 26 kilogramos contando ya una batería de peso promedio, cuyo peso promedio es de 3 Kilogramos.

Que por cierto, en cuanto hablamos de las baterías, se trata de equipos de litio con celdas Panasonic y garantía de hasta dos años. Su rendimiento estimado es de 25 a 100 kilómetros por carga, aunque claro, esa cantidad es sujeto de varios factores, como el tipo de superficie en la que estén las bicicletas, las pendientes o si quien la conduce contribuye al impulso de la bicicleta pedaleando. Su tiempo de carga va de las dos a las cuatro horas.

Sobre esto último, Juan Pablo nos comenta:

"Hay baterías que, según recomienda el vendedor, la cargues por determinado tiempo y después la desconectes, con las baterías de Pedego no sucede eso, tú puedes dejar cargándose la batería toda la noche, y en el momento en el complete su carga, automáticamente interrumpirá el abasto de electricidad"

También es importante destacar que aunque existe la tecnología por la que una batería puede cargarse con ayuda del pedaleo, no es el caso de Pedego. Aquí el pedaleo puede ayudar a conservar la batería, mas no la carga.

Asistente y Acelerador, las dos modalidades de Pedego

Las bicicletas Pedego hacen uso del motor incorporado a través de dos modalidades: Throttle, que es el nombre que recibe cuando el motor abastece por completo la demanda de la bicicleta para que esta avance; y Pedal Assist, que básicamente funciona otorgando soporte y asistencia al pedaleo, entre más fuerte se pedalee, mayor impulso dará el motor.

Mientras que el primer modo es particularmente útil ante pendientes muy empinadas, el segundo brinda una sensación un poco más natural y convencional si se le compara con la experiencia de una bicicleta normal.

Un breve apunte aquí. Curiosamente el modo Throttle está prohibido en varios mercados, puesto que provoca confusión sobre si los vehículos que le usen no se convierten en motorizados sobre dos ruedas, al estilo de una motocicleta. Sin embargo, en México, no hay norma que les prohiba o les exija diferenciarse a través de sus especificaciones, de una motocicleta.

Cultura vial

"Hay cada vez más gente que se mueve en bicicleta; la cultura vial está cambiando y eso es lo que ayuda a este mercado. En el caso de Pedego se trata de colores y diversión, se trata de una forma más amigable de transitar en Ciudad de México".

A la optimista forma de ver la cultura vial de las bicicletas que nos platica Juan Pablo, matizariamos levemente cuando pensamos que en Ciudad de México se cuenta con 170 kilómetros de ciclovías, una cantidad nada despreciable cuando se le menciona por sí sola, pero limitada cuando se observa que gran parte de la infraestructura no pasa de las delegaciones Miguel Hidalgo y Benito Juárez, dejando fuera el resto de las otras 14 delegaciones de la capital.

Habiendo dicho eso, es innegable que los esfuerzos para crear marcos normativos amigables con la cultura vial ciclista están ahí, y como muestra están los lineamientos en construcción que la SEMOVI está generando en favor de promover la llegada de empresas que ofrecen servicios de bicicletas compartidas.

Costos

Una persona puede llegar al local ubicado en Schiller número 325 y comprar una bicicleta, un casco o una batería, pero también puede rentar una bici. Juan Pablo nos cuenta que hay esquemas para rentar por dos, cuatro y hasta ocho horas. En el primero el precio es de aproximadamente 400 pesos, en el segundo es de 650 pesos y el último es de 800 pesos.

En cuanto a los costos para compra, su rango también depende mucho del tipo de batería, y desde luego el modelo, pero podemos establecer un rango de entre 45 y 100 mil pesos.

Seguramente habrá más de uno que arquee las cejas frente a estos precios, pero no hay que olvidar que no se trata de una bicicleta convencional la que obtiene uno a cambio. Aunque sí, de momento se trata de costos que limitan el público al que va dirigido.

Más información | Pedego

Imágenes | Carta de México, Pedego