Hace unos días se han llevado a cabo las primeras pruebas de vuelo de uno de los últimos aviones desarrollados en México. Estas se realizaron en el Aeropuerto Intercontinental de Querétaro (AIQ), en concreto en las instalaciones del Centro Nacional de Tecnologías Aeronáuticas (Centa).
El nombre de este avión es H1 y es un primer prototipo construido con fibra de vidrio y madera compuesta. La empresa que está detrás de este desarrollo es la mexicana Horizontec, en colaboración con el Centa.
Este avión está enfocado para el uso recreativo, deportivo y escuelas de aviación. Y es que es un modelo biplaza con monomotor de 100HP. Su envergadura es de 9.4 metros y tiene un largo de 7 metros.
La clave está en su consumo, que será de 10 litros por hora, pudiendo tener una autonomía de hasta 8 horas, alcanzar una altura de 15,000 pies y una velocidad máxima de 320 kilómetros por hora.
Según la empresa, esta aeronave es el primer paso para construir un modelo llamado H2.1. Éste será producido en una nueva plata que se terminará de construir en febrero de 2018, para que en marzo de ese mismo año, se presente al mundo de manera oficial.
El precio del H2.1 rondará entre los 120,000 y 260,000 dólares, y la producción anual que proyecta la empresa es de hasta 40 unidades al año. Claro, para ello primero tienen que terminar de construir su planta de ensamblaje.
Hay que destacar que este no es el primer avión desarrollado en México, el Pegasus PE-210A fabricado por Oaxaca Aerospace es uno de los que se llevan ese título, aunque su configuración con alas canard lo hacen un pocO diferente al H1.
La página oficial de Horizontec tiene un montón de fotos de cómo luce el H1, aquí dejamos algunas:
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