Hace 10 años sobreviví a un huracán; ante la llegada de Patricia esto te aconsejo

El día de ayer Patricia se perfilaba apenas como una tormenta tropical, sin embargo, la calidez de las aguas en esa área del Pacífico, fue suficiente para fortalecerla, llevándola así a convertirse en un monstruoso huracán categoría 5 en la escala de Saffir - Simpson, se han reportado vientos sostenidos de 325 Km/h, con rachas de hasta 400 Km/h.

Sin duda un fenómeno meteorológico que podría sacarle más de un susto a la gente, pero, a diferencia de otros potenciales desastres, como un sismo, un huracán avisa con anticipación de su llegada, si bien es cierto que ayer era solo una Tormenta Tropical, sí hubo tiempo suficiente para tomar las debidas precauciones. Pero, ¿qué medidas hay que tomar?

Plan A. Busca un refugio

Ante un huracán lo más importante es prevenir, evaluar tu vivienda, si ves que no es segura, porque la construcción no es firme, o estás demasiado cerca de la costa, el primer paso es buscar un refugio temporal. Generalmente las escuelas, gimnasios y otros edificios municipales son habilitados como refugio y cuentan con suficiente abasto de agua, alimentos y cobijas para las personas que los utilicen.

Plan B. Permanece en casa

Si por el contrario, tu casa se te antoja un lugar seguro, hay también algunas consideraciones importantes que hacer. Lo primero sería abastecerte de agua y alimentos no perecederos para cuando menos 72 horas.

También es aconsejable cubrir las ventanas desde la parte de afuera con tablas de madera para evitar proyectiles que puedan estrellar o astillar los vidrios, y hacer una figura en forma de asterisco con cinta adhesiva fuerte en las ventanas, por si llegan a romperse, que los vidrios no salgan volando, provocando un accidente mayor.

Una linterna y un radio de baterías son casi obligatorios, puesto que es muy probable que haya cortes a la energía eléctrica, y la radio sea el único medio para tener comunicación con el exterior. Las estaciones municipales son las encargadas de difundir los reportes de la CONAGUA cada hora.

Durante el paso del meteoro, lo más importante es no salir de casa por ningún motivo, ya que las rachas de viento, pueden hacer que vuelen proyectiles desde pequeños como ramas y basura, hasta enormes como un tinaco, lo mejor es permanecer en calma, si estás con tu familia, pueden organizar un maratón de juegos de mesa, y para las horas de oscuridad, lo mejor es contarse cuentos, historias y anécdotas familiares, así crearás mejores recuerdos de esos días.

Otra cosa importante es mantener tus documentos secos y a la mano, para lo cual puedes valerte de bolsas de plástico, cerciorándote de que no estén agujeradas, entre los documentos importantes están las actas de nacimiento, matrimonio, certificados y títulos de estudio, pasaportes, credenciales de elector y cualquier otra identificación. Otra buena opción es mantener un respaldo de nuestra información en la nube.

Hay que desconectar el gas, cerrar la toma de agua potable si estuviera muy expuesta a los vientos, y bajar el switch de luz, para evitar el riesgo de un corto circuito. Una cosa muy importante, por ningún motivo utilizar velas, ya que los vientos pueden provocar un incendio al volar las cortinas o algún otro objeto flamable.

Debemos tener a mano ropa impermeable, sábanas, cobijas y algún suéter o chamarra, ya que por lo general la fuerza de los vientos hace que descienda sensiblemente la temperatura. Ante todo es necesario mantener la calma, obrar de acuerdo con lo que digan las autoridades.

Cuando el ojo del huracán pasa por encima de nuestra localidad, es posible sentir una calma temporal, por ningún motivo hay que salir de casa en esos momentos, puesto que al entrar la pared opuesta del huracán, los vientos girarán en sentido contrario, con lo cual pueden terminar de arrancar los árboles que hubieran quedado medio desprendidos, así como láminas de los tejados, tinacos, y cualquier otro objeto que puede convertirse en un proyectil capaz de cegar una vida.

Si las autoridades dan la indicación de que el peligro ha pasado, es momento de hacer un recuento de los daños, es posible que la vivienda haya sufrido algún destrozo del cual no nos percatamos por estar dentro, también hay que contribuir a la eliminación de estancamientos de agua para no propiciar nacimientos descontrolados de mosquitos, ayudar a los vecinos que hayan tenido peor suerte que nosotros, y si estuviste en un refugio, hay que esperar a que nos sea indicado que es seguro volver al hogar.

Consejos especiales para tecnófilos

Sigue la cuenta de Twitter de CONAGUA o el hashtag #HuracánPatricia, carga la batería de tu celular al 100% y solo enciéndelo en caso de emergencia, si tienes baterías externas, también cárgalas completamente, si tuvieras más de un teléfono, hay que cargarlos también. Recuerda que lo más importante es mantener tus dispositivos con energía.

Por nada del mundo se te ocurra ponerte a jugar con tu celular en lo que estás sin luz, esperando a que pase el huracán, eso provocaría que te quedaras muy pronto sin batería, y sin poder llamar a alguien en caso de emergencia.

Existen diversas transmisiones en vivo de los lugares afectados, así que podrían ser vías útiles para seguir el suceso desde internet.

Si tienes niños en casa, recuerda que hay montones de juegos que no vienen en una tablet, aunque no estaría de más, tener la tablet cargada por si acaso se nos ha olvidado como jugar. Mi consejo, ten a mano lápices de colores, marcadores y hojas en blanco, con eso tendrás asegurados algunos ratos de distracción.

Sobreviviendo a un huracán

Hace 10 años, me tocó estar en Cancún durante el paso del huracán Wilma, también de categoría 5 que por largas horas estuvo azotándonos con sus vientos de más de 300 kilómetros por hora, fueron momentos llenos de tensión, de oraciones, de convivir estrechamente con la familia. Trabajaba en televisión, el jueves por la noche habíamos cerrado la transmisión diciéndole a los ciudadanos y turistas que tomaran sus precauciones y permanecieran en casa.

El huracán entró a tierra en las primeras horas del viernes, y no fue sino hasta la mañana del domingo en que todo peligro hubo pasado. Lo mejor vino después del huracán, pero no de manera inmediata, aún viven en mi mente las imágenes de una ciudad destruida, torres de alta tensión dobladas en formas inimaginables, árboles arrancados desde la raíz, bardas enteras de las casas derribadas por efecto del viento y la lluvia, ni qué decir de la zona de hoteles, muchos tuvieron que ser derribados para empezar desde cero, las playas se quedaron sin arena, la visión era devastadora.

Pero como bien dije, lo mejor vino después del huracán, fui testigo de la solidaridad de la gente, de la ayuda inmensa que prestaron el ejército, la marina, la policía, mis respetos para los funcionarios de CFE, de CONAGUA, que lograron echar a andar la maquinaria burocrática para que la ciudad volviera a la normalidad lo antes posible.

A los paisanos del Pacífico, especialmente a los de Colima, Nayarit y Jalisco, les deseo que puedan pasar este fenómeno con calma, rodeados de su familia, y que puedan contarlo pasados unos días como una experiencia de la cual salieron victoriosos.

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Imagen | NOAA | Scoot Kelly | NOAA