Desde hace un par de días el hashtag #CharlieCharlieChallenge está moviendo de forma importante Twitter y otras redes sociales. Para quien aún no se entera de qué va lo explicaré de forma breve: fue creado hace unos días por el usuario @_kluh, y con éste trató de imprimir la práctica de —si ustedes así lo creen— invocar un espíritu y hacerle preguntas por medio de un supuesto ritual.
Justo después de su creación, y de que otros usuarios replicaran la práctica, #CharlieCharlieChallenge se ha convertido rápidamente en un tema viral que está inundando diversas redes sociales. Lo que nos ha parecido curioso, más allá explicación lógica de su funcionamiento, es que se asegura que el espíritu es mexicano, y es más, que el ritual pudo haberse originado en nuestro país, supuestamente.
En qué consiste #CharlieCharlieChallenge
El ritual de #CharlieCharlieChallenge es sencillo:
- Dibujamos una cruz en una hoja.
- En cada uno de los espacios de la cruz debemos escribir palabras que sirvan como respuestas del espíritu.
- Se colocan dos lápices formando una cruz (uno encima de otro)
- Preguntamos Charlie Charlie ¿estás ahí?.
- Y la supuesta respuesta llegaría con el movimiento del lápiz superior hacia alguna de las palabras escritas.
Como era de esperar en un tema viral, los videos de los lápices moviéndose, y las enormes recopilaciones de los mismos, están inundando la web, ampliando así su popularidad y fuerza tanto del hashtag como de la práctica.
Pero el tema no sólo está quedando ahí, ya que los creyentes de lo paranormal aseguran que dicho espíritu —o demonio, o como gusten llamarlo— interactúa con el entorno de donde se realiza el ritual, y es más, que si no lo despedimos puede quedarse cerca de nosotros y realizar un montón de atrocidades.
No es un espíritu, es la gravedad
No me detendré a dar una clase de física, pero tal como apuntan desde The Independent, el movimiento de los lápices no tiene otro motivo más que la gravedad.
Sí, debido a que ambos lápices se encuentren en un punto de equilibrio, cualquier fuerza externa, así sea la más mínima corriente de aire (incluyendo la respiración de las mismas personas) o el movimiento de la mesa, implicará que los lápices se muevan.
Sobre esto no me quedan dudas, y es más, si quieren intentarlo háganlo y sin hacer el respectivo ritual los lápices de forma inevitable se moverán. O en un caso contrarío si en el lugar no existe ninguna corriente de aire o movimiento, ni gritándole al supuesto Charlie lograremos que éstos cambian de posición.
¿Tiene su origen en México?
Tal como lo hemos dicho, la leyenda indica que Charlie es un espíritu mexicano. O sea, ¿el ritual invoca a una fuerza paranormal de origen mexicano y con nombre Charlie?, como lo dicen desde la BBC, para que esta teoría fuera un poco más creíble al menos le hubieran puesto Carlitos o algún nombre relacionado con antiguas leyendas populares de nuestro país.
Por otra parte, sobre sus orígenes, no está en claro quién fue la primera persona que lo realizó, pero igual se apunta a que probablemente el ritual nació en México. Cuando hace unos días leí la historia de #CharlieCharlieChallenge me fue inevitable no recordar otro ritual que alguna vez realicé en mis años de estudiante, y que muchos integrantes del grupo editorial realizaron.
Este consistía en colocar seis lápices formando un rectángulo, igual invocábamos al espíritu, y si la unión de los lápices se movía hacia dentro, o hacia afuera, consistía en una respuesta de éste. Para mi sorpresa diversos medios citan este ritual como el origen de #CharlieCharlieChallenge todo por un video en el que un par de chicos lo realizan invocando a alguien llamado Charlie, quizá esa sea otra de las razones por las que se dice que el espíritu es de origen mexicano.
En fin, ahora mismo el hashtag ya ha sido compartido por unos cuantos millones de personas, el ritual se ha convertido en viral, y diversas variantes han empezado a salir a la luz. Para mi, éste sólo es un ejemplo más de cómo internet puede tomar referencias de algo tan sencillo (y que fue popular en nuestro país desde hace muchos años) transformarlo y convertirlo en algo viral.
Así es Internet en 2015.
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