Lenovo se ha mantenido bajo la mirada del ecosistema tecnológico debido a previos movimientos importantes en cuanto a la industria de smartphones se refiere. Sin embargo, en esta ocasión la compañía china es noticia en nuestro país por un caso que involucra sus equipos de cómputo.
El fabricante chino es sin lugar a dudas un fuerte contendiente en el mercado nacional de equipos de cómputo, tanto en el segmento de equipos para casa y oficina, el segmento de dispositivos 2-en-1, e inclusive el segmento gamer, uno de los más exigentes en cuanto a materiales, especificaciones y componentes en general se refiere. Es debido a su apabullante presencia que resulta muy llamativo el bloqueo para la instalación de otros sistemas operativos que impone en sus dispositivos.
¿Restricción o protección?
El caso que presentamos es el de Jacobo Nájera, programador que en noviembre de 2014 compró una laptop Lenovo Yoga II y quien se llevó una sorpresa al intentar desinstalar Windows y encontrarse con el seguro secure boot que no permite realizar esta acción.
Para entrar en contexto, el sistema secure boot, o de carga segura, es una característica impuesta por Microsoft desde Windows 8. Dicha función se promueve como de "protección ante la instalación de programas ilegítimos" y está enmarcada en el estándar UEFI (Interfaces Unificados de Firmware Extensible en español).
Regresando al tema, Nájera interpuso una demanda ante la PROFECO ya que esta función de carga segura no viene especificada en las características del dispositivo. Después de una puja de algunos meses, la PROFECO logró la victoria del demandante, pero la resolución no fue del todo satisfactoria ya que simplemente se impuso una multa, sin obtener solución para retirar este sistema restrictivo.
¿Y luego..?
De acuerdo con datos de la PROFECO, así como este hay muchos más casos en contra de Lenovo. Sin embargo, si bien es cierto que la queja en contra del fabricante se escala hacia los distribuidores de sus productos, quienes no comunican como debe de ser la presencia de esta restricción, el tema va mucho más allá.
De hecho, es equiparable a lo que sucedía hace algunos años con la liberación de smartphones para su uso bajo cualquier red de telefonía, ya que una vez que el cliente ha pagado el valor del dispositivo ¿por qué limitarlo? Es ahí en donde la verdadera polémica comienza, y lamentablemente también ahí termina ya que de momento no hay solución para retirar el bloqueo.
Nuevamente, el problema se escala, ahora a Microsoft, aunque si bien la compañía está en todo su derecho de implementar esta medida, son los fabricantes de equipos de cómputo quienes tienen la obligación de, en caso de requerirse, facilitar la información del proceso para retirar este cerrojo una vez que el cliente ha pagado el valor tanto del hardware como del software, y así instalar un sistema operativo diferente al Microsoft.
Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com.mx
VER 10 Comentarios