Pasar muchas horas sentado es mortal, pero los sedentarios tienen un aliado inesperado: el café

De acuerdo con una nueva investigación, el café podría salvarnos la vida. Entre los múltiples beneficios de esta popular bebida, uno de ellos podría ser fundamental para combatir los estragos del sedentarismo. Y es que hace unos meses comentamos sobre los problemas del trabajo moderno: aumento de la mortalidad por pasar muchas horas sentados.

Aunque no todos los trabajos son de esa naturaleza, es innegable que una gran parte de la población realiza su trabajo sentados. En ese sentido, un grupo de investigadores de China se dio a la tarea de estudiar al café y su posible uso para disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares asociadas al trabajo sedentario.

Pero antes de pasar de lleno a los resultados, hay que tener claro qué tipo de información utilizaron para el estudio. El conjunto de datos proviene del National Health and Nutrition Examination Survey (NHANES) de Estados Unidos, el cual dio seguimiento durante 13 años a más de 10,639 personas, de las cuales 945 murieron a lo largo de ese tiempo.

Según lo encontrado por los investigadores, sentarse más de ocho horas al día está asociado con una mayor mortalidad "por todas las causas". No sé yo exactamente a qué se refiere "por todas las causas", pero parece que es una expresión comúnmente utilizada en estudios de esta naturaleza y se refiere a la mortalidad por cualquier razón, desde enfermedades hasta accidentes. Algo más literal de lo que pensaba.

Regresando al caso de estudio, los resultados revelaron algo impresionante. Las personas que no consumen café y que pasan mucho tiempo sentadas tienen un mayor riesgo de mortalidad por sedentarismo. Sin embargo, aquellos que sí beben café, pero que también tienen un estilo de vida sedentario, prácticamente disminuyen en su totalidad el riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares.

Pero no termina ahí. El café tiene un gran abanico de beneficios, entre los que se incluyen propiedades anti inflamatorias, mejoras al metabolismo, efectos antioxidantes y presencia de moléculas que ayudan al buen envejecimiento. La cafeína, así como los ácidos presentes en esta bebida, son clave para reducir la inflamación.

Del mismo modo, se menciona que el café ha demostrado ser realmente útil para personas con resistencia a la insulina. Eso sin mencionar la gran cantidad de antioxidantes presentes en él. Justo son los antioxidantes uno de los factores relevantes para que el café ayude a prevenir enfermedades cardiovasculares.

Pese a todo, el mismo estudio destaca la importancia de seguir estudiando estos casos para encontrar una respuesta clara sobre por qué el café tiene tantos beneficios. Aun con ello, este tipo de estudios pueden ayudar a la salud pública, hasta cierto punto.

El café es bueno, pero no es una panacea

¿Por qué hasta cierto punto? Bueno, esto no es más que una opinión. Aunque esta clase de estudios pueda apoyar a las personas que no tienen otra opción más que pasar horas y horas sentados a encontrar soluciones para mejorar su calidad de vida, lo cierto es que una vida sedentaria nunca será la mejor opción para nuestra salud.

Yo mismo he vivido esa realidad en la que no te paras de tu asiento por más de ocho horas, salvo para ir al baño o realizar acciones muy puntuales. Llegar al equilibrio entre el tiempo que pasas trabajando y el tiempo que dispones para hacer un poco de actividad física es complicado. Quizás en el futuro, una jornada laboral de menos horas nos lo permita.

Lo único que queda es hacer lo mejor posible y aprovechar las brechas que tengamos para movernos un poco. El mismo estudio recalca que los beneficios del café no suplantan a otros que vienen de la mano de una vida más activa. A veces el deporte se siente como un privilegio, pero caminar un poco y estirarnos unos cuantos minutos pueden ayudar mucho.