Epic ha hecho lo imposible: vencer a Google. El creador de Fortnite ha conseguido lo que con Apple no ha podido y las implicaciones son tan mayúsculas que el ecosistema completo será trastocado. La pelea legal inició hace tres años y ahora Epic ha conseguido que un jurado decida que, en efecto, Google tiene un monopolio desarrollado con ayuda de su Play Store, que trastoca a todo teléfono Android en el planeta.
Esencialmente, lo que el jurado decidió es que Google tiene el monopolio de la distribución de apps en Android y también sobre los servicios de pago. Claro, en Android los usuarios puedes descargar aplicaciones de otras fuentes, pero Epic ha conseguido ilustrar el punto de que los usuarios que deciden no acudir a la Play Store se enfrentan con una experiencia pobre, repleta de anuncios y quedan indebidamente expuestos a malware.
A través de un comunicado, Epic dijo:
"El veredicto del día de hoy es una victoria para desarrolladores de aplicaciones y consumidores en todo el mundo. Prueba que las prácticas de la tienda de apps de Google son ilegales y que han abusado de su monopolio para extraer exorbitantes comisiones, ahogar la competencia y reducir la innovación"
Parte de la lógica de Epic son hechos que conocimos durante el juicio. Por ejemplo, Google estuvo dispuesto a pagar miles de millones de dólares con tal de que desarrolladores hicieran sus aplicaciones pensando exclusivamente en Play Store. Google pagó millones de dólares para que Play Store fuera la opción predeterminada en teléfonos Samsung y ofreció acuerdos secretos a grandes jugadores con tal de convencerles de no separarse de la tienda y usar sus propios procesamientos de pago, tal y como pasó con Spotify. En su momento, la justificación de Google sobre el tema Spotify fue la siguiente:
"Si Spotify no funciona correctamente en los servicios Play y en los servicios principales, la gente no comprará teléfonos Android".
Cambios pendientes
Epic no consiguió una victoria contundente contra Apple. Lo que ganó fue una orden emitida para que Apple permita en todos los mercados que desarrolladores procesen los pagos de sus clientes. Apple, por su parte, consiguió un logro incomensurable: ser declarada como una empresa exitosa que no tiene un monopolio. La decisión puede que no haya venido de un jurado, pero indudablemente le dio legitimidad al modelo de negocios de Apple. En todo caso, dado que todavía apelaciones de por medio, las consecuencias últimas todavía están en el aire.
Epic le ha ganado a Google, pero lo más seguro es que los siguientes meses se vayan en apelaciones del gigante de internet. Las implicaciones para todos los usuarios están por verse, pero hay un abanico de opciones abierto: Google podría ser multado con una nueva cifra estratosférica, Fortnite podría ser ordenado que vuelva a Play Store e, incluso, la tienda de Android podría ser obligada a disminuir sus comisiones, lo que implicaría que el precio de suscripciones en Play Store baje significativamente. El resultado también podría ser una mezcla de todas las anteriores.
Mientras tanto, Wilson White, Vicepresidente de Asuntos Gubernamentales y Política Pública de Google, ha lanzado una postura que ha sido retomada primero por The Verge:
"Tenemos previsto impugnar el veredicto. Android y Google Play ofrecen más posibilidades de elección y apertura que cualquier otra gran plataforma móvil. El juicio dejó claro que competimos ferozmente con Apple y su App Store, así como con las tiendas de aplicaciones de los dispositivos Android y las consolas de videojuegos. Seguiremos defendiendo el modelo de negocio de Android y seguimos profundamente comprometidos con nuestros usuarios, socios y el ecosistema Android en general".
Con el final del juicio entre Epic y Google, la batalla ha llegado al cierre de un capítulo. Epic ha ganado su victory royale, pero a diferencia de Fortnite, en la vida real la corona se entrega hasta que las apelaciones hayan terminado. Por ahora, a Epic y Google no les queda más que volver a lobby y esperar el siguiente emparejamiento.
