SEMARNAT a la cabeza en los esfuerzos internacionales por la conservación de la vaquita marina

De la vaquita marina hemos hablado en varias ocasiones, señalando que es víctima de las redes de enmalle en las que queda atrapada, y que además sufre porque tiene más o menos el mismo tamaño que la totoaba, pez cuya vejiga natatoria es considerada un manjar en oriente y que es ilegal pescarlo. Ahora esta marsopa vuelve a ser noticia pues la SEMARNAT junto con el Comité Internación la para la Recuperación de la Vaquita (CIRVA), están armando un plan para evitar su extinción.

En este ambicioso plan de emergencia, se trasladarían algunas vaquitas a un santuario temporal, con la esperanza de desalentar la pesca ilegal, y eliminar las redes de enmalle de su hábitat en el Alto Golfo de California. Sin embargo, al ser un mamífero tan esquivo, y que se conoce suele alejarse de las embarcaciones motorizadas, no es posible saber con certeza si esta medida evitará su extinción o la acelerará.

Un plan lleno de incertidumbre

Sin embargo, el gobierno Mexicano no está solo, ya que para esta gran empresa contarán con el apoyo de varias instituciones públicas y privadas que forman un consorcio de expertos en mamíferos marinos. El programa denominado VaquitaCPR (Conservación, Protección y Recuperación) es un plan de emergencia, pleno de incertidumbre, y que además empezará en los próximos meses. Al respecto el Dr. Sam Ridgway, presidente del a National Marine Mammal Foundation comentó:

Reconocemos que las probabilidades están contra nosotros, pero la conservación y las comunidades científicas sienten que es su obligación actuar, por lo que esperamos que nuestra experiencia colectiva pueda hacer una diferencia

En un párrafo del comunicado emitido por SEMARNAT se lee lo siguiente:

Incluso si no es posible salvar a la vaquita marina, la situación debe ser controlada para proteger a las tortugas, tiburones, delfines y muchas otras criaturas marinas.

Pareciera que se están dando por vencidos antes de intentarlo, pero es que van demasiado tarde, durante años se ha sabido que esta especie se encuentra en peligro de extinción, que la totoaba se pesca igualmente porque aunque su captura es ilegal, se paga a precios exorbitantes, siguiendo la ruta comercial México - Estados Unidos - China, y parece que pocos son los organismos mexicanos o estadounidenses que están realmente haciendo algo para evitar estas extinciones, que más parece la "crónica de una muerte anunciada".

Las instituciones que están enfocadas ahora en evitar la extinción de la vaquita marina son: el CIRVA, la Fundación Nacional de Mamíferos Marinos, el Centro de Mamíferos Marinos, la Sociedad Zoológica de Chicago y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos.

Lo que el gobierno de México había hecho al respecto fue prohibir en 2015 y durante dos años el uso de la red de enmalle en el área de distribución de este pequeño cetáceo, además se ofreció compensación económica a los pescadores para que dejaran sus redes y se enfocaran en otros oficios al menos durante estos dos años, pero la población en lugar de mantenerse o subir, siguió bajando.

Otras instituciones que esperan ayudar a evitar la extinción de la especie son la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), la Secretaría de Marina y la Secretaría de la Defensa Nacional.

Por la parte de los Estados Unidos tenemos a la Universidad de Duke y la Comisión de Mamíferos Marinos de Estados Unidos, también Dolphin Quest, SeaWorld, el acuario de Vancouver, la Fundación Waitta, y al Fondo de Rápida Respuesta para la Conservación de Disney, apoyaron para crear este plan de emergencia.

Sin embargo, la pregunta aún sigue en el aire, ¿conseguirán estos esfuerzos evitar la extinción, o bien acelerarla? La respuesta la tendremos con el tiempo.

Más información | VaquitaCPR