La Ciudad de México se hundió 25 centímetros después del sismo del 19 de septiembre

El pasado mes de septiembre vivimos un momento que se sumaba a la larga historia de Ciudad de México. Aproximadamente a las 13:14 horas del día 19 se presentó un sismo de magnitud 7.1 con epicentro al sureste de Axochiapan, Morelos, la cercanía del suceso a la capital del país tuvo un montón de consecuencias, las cuales a día de hoy siguen saliendo a la luz.

Un grupo de investigadoras del Centro de Investigación en Ciencias de Información Geoespacial (Centrogeo) perteneciente al Conacyt, indicaron que la Ciudad de México se hundió 25 centímetros después del terremoto.

Un hundimiento 10 veces mayor al que tiene mes con mes CDMX

El hundimiento de la capital del país no es una novedad. Cada año la ciudad se hunde un aproximado de 2 a 2.5 centímetros por mes, pero la cifra que registraron las investigadoras durante septiembre es atípica, siendo diez veces mayor aproximadamente.

Mapa de desplazamientos. Vía Conacyt.

Las zonas donde se registraron mayores desplazamientos son las delegaciones Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza, Iztacalco, Benito Juárez, Coyoacán e Iztapalapa. Curiosamente estas zonas no tienen relación directa con las que presentaron derrumbes, y tampoco implica que éstas presenten un mayor hundimiento con el paso de los años.

Para determinar la cantidad de hundimieto después del sismo se hizo uso de interferometría, una técnica que se basa en el uso de radares SAR (Synthetic-aperture radar) de los satélites Sentinel 1A y 1B de la Agencia Espacial Europea.

Como hemos dicho, la Ciudad de México ha sufrido de un desplazamiento negativo desde hace años ¿las causas? la explotación de los mantos acuíferos que están bajo la superficie, recordemos que la capital se ha fundado encima del famoso Valle de México.

Representación del Valle de México. Vía Madman2001.

Desgraciadamente este asentamiento, además de deformar construcciones y provocar socavones, afecta directamente a la infraestructura de agua potable y a los drenajes, siendo este un problema que se suma a la polémica de escasez del vital líquido en la capital del país.